Palabra de Dios 13 de Oct. 2023. Viernes XXVII Tiempo Ordinario.
Evangelio de dia.
PRIMERA LECTURA.
Del libro del profeta Joel (1, 13-15; 2, 1-2)
Hagan penitencia y lloren, sacerdotes; giman, ministros del
altar; vengan, acuéstense en el suelo vestidos de sayal, ministros
de mi Dios, porque el templo del Señor se ha quedado sin ofrendas
y sacrificios.
Promulguen un ayuno, convoquen la asamblea, reúnan a los
ancianos y a todos los habitantes del país en el templo del Señor,
nuestro Dios, y clamen al Señor:”¡Ay de nosotros en aquel día!”
Porque ya está cerca el día del Señor, y llegará como el azote del
Dios todopoderoso.
Toquen la trompeta en Sión, den la alarma en mi monte santo;
que tiemblen los habitantes del país, porque ya viene, ya está cerca
el día del Señor. Es un día de oscuridad y de tinieblas, día de nubes
y de tormenta; como la aurora se va extendiendo sobre todos los
montes, así se extenderá el poderoso ejército que viene: nunca
hubo uno como él ni habrá otro igual a él por muchas generaciones.
Palabra de Dios.
SALMO.
Salmo (9, 2-3. 6 y 16. 8-9)
R. El Señor juzga al mundo con justicia.
Te doy gracias, Señor, de todo corazón y proclamaré todas tus
maravillas; me alegro y me regocijo contigo y toco en tu honor,
Altísimo.
R.
Reprendiste a los pueblos, destruiste al malvado y borraste para
siempre su recuerdo. Los pueblos se han hundido en la tumba que
hicieron, su pie quedó atrapado en la red que escondieron.
R.
El Señor reina eternamente, tiene establecido un tribunal para
juzgar; juzga al orbe con justicia y rige a las naciones con rectitud.
R.
EVANGELIO.
Evangelio según san Lucas (11, 15-26)
En aquel tiempo, cuando Jesús expulsó a un demonio, algunos
dijeron: “Este expulsa a los demonios con el poder de Satanás,
el príncipe de los demonios”. Otros, para ponerlo a prueba, le
pedían una señal milagrosa.
Pero Jesús, que conocía sus malas intenciones, les dijo: “Todo
reino dividido por luchas internas va a la ruina y se derrumba casa
por casa. Si Satanás también está dividido contra sí mismo, ¿cómo
mantendrá su reino? Ustedes dicen que yo arrojo a los demonios con
el poder de Satanás. Entonces, ¿con el poder de quién los arrojan
los hijos de ustedes? Por eso, ellos mismos serán sus jueces. Pero
si yo arrojo a los demonios por el poder de Dios, eso significa que
ha llegado a ustedes el Reino de Dios.
Cuando un hombre fuerte y bien armado guarda su palacio, sus
bienes están seguros; pero si otro más fuerte lo asalta y lo vence,
entonces le quita las armas en que confiaba y después dispone de
sus bienes. El que no está conmigo, está contra mí; y el que no
recoge conmigo, desparrama.
Cuando el espíritu inmundo sale de un hombre, anda vagando
por lugares áridos, en busca de reposo, y al no hallarlo, dice:
‘Volveré a mi casa, de donde salí’. Y al llegar, la encuentra barrida
y arreglada. Entonces va por otros siete espíritus peores que él y
vienen a instalarse allí, y así la situación final de aquel hombre
resulta peor que la de antes”.
Palabra del Señor.
REFLEXIÓN: Jesús –el único que de verdad puede
hacer triunfar consistentemente el Reino de Dios–
representa la irreconciliable contraposición a todo lo
demoníaco. Él es el eficaz antagonismo a todo aquello
que, de cualquier forma, pueda ser o aparecer como
enfrentado a lo divino. Nosotros, por eso, hemos de
estar en guardia contra cualquier tipo de pacto con
el Maligno, ya que nadie está “confirmado en gracia”.
Sólo Jesús nos puede proteger y salvar de tan insidioso
Enemigo, al hacernos salir triunfantes y al asociarnos
a su victoria definitiva, ya que sólo Él es «el más fuerte».