“DE JACOB SE LEVANTA LA ESTRELLA”.
En aquellos días, Balaam levantó los ojos y divisó a Israel acampado por tribus. Entonces el espíritu del Señor vino sobre él y pronunció este oráculo: “Oráculo de Balaam, hijo de Beor, palabra del varón de ojos penetrantes; oráculo del que escucha la Palabra de Dios y contempla en éxtasis, con los ojos abiertos, la visión del Todopoderoso.
Qué bellas son tus tiendas, Jacob, y tus moradas, Israel. Son como extensos valles, como jardines junto al río, como áloes que plantó el Señor, como cedros junto a la corriente. De su descendencia nace un héroe que domina sobre pueblos numerosos”.
Y de nuevo dijo: “Oráculo de Balaam, hijo de Beor, palabra del varón de ojos penetrantes, oráculo del que escucha la Palabra de Dios y conoce la ciencia del Altísimo y contempla en éxtasis, con los ojos abiertos, la visión del Todopoderoso.
Yo lo veo, pero no en el presente; yo lo contemplo, pero no cercano: de Jacob se levanta una estrella y un cetro surge de Israel”.
PALABRA DE DIOS.- TE ALABAMOS, SEÑOR.
Se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México.