MUJER, SANA TU CORAZÓN, LA MEJOR HERENCIA PARA TUS HIJOS.
(Por Rosa María Ordaz)
Laicos compartiendo la fe.
Comentario de evangeliza fuerte:
El encuentro con Cristo Jesús es lo más extraordinario que le puede pasar a un hombre, cambia totalmente su mundo, el panorama se abre, sus ojos empiezan ver más allá de donde se posaban, sin embargo, hay secuelas que nos acompañan de nuestra vida anterior y es ahí donde “la grandeza de Jesús impacta”, “NOS EMPIEZA A DAR HERRAMIENTAS PARA SANAR EN EL TRANSCURSO DE NUESTRA CONVERSIÓN”, sí, así como lo lee, Jesús va sanando también el corazón llevándole a recuperar su salud, mental, emocional, físico y desde luego que la mujer con la enorme sensibilidad que le ha dado Dios no puede quedar exenta.
Sanar el corazón de ella, trae grandiosos beneficios a los hijos o con convive con la mujer, por esa razón nos ha parecido importante tomar un escrito de la srita. Rosa María Ordaz y difundirlo, su perspectiva de ella nos conduce a ver una parte de la mujer que muchas veces se nos pierde de vista: “sanar”. Ponemos integro el artículo deseando sea de beneficio.
Artículo
*La comprensión, el amor; te hacen resurgir cada día, como rosa en plenitud que destila el perfume de tu elegancia de ser mujer.
Roma, conocí a Estefania, una joven de la zona de Calabria en Italia. Me invitó un café, durante nuestra charla, manifestó, que en el lapso de una hora tenía que estar en la iglesia de San Ignacio de Loyola, en una misa de sanación. Textualmente sus palabras fueron las siguientes: – tengo mi corazón muy lastimado, lleno de heridas que necesito sanar -.
Evoqué mi encuentro con Francesca, en el mismo lugar. En nuestra platica a la hora de los alimentos, ella; curiosamente, me invito a una misa de sanación en la iglesia de la Universidad del “Angelicum”, también conocida como Santo Thomas de Aquino en Roma, Francesca hablo de la gran cantidad de personas que asisten a estas dos horas de oración y liberación, de como le ha ayudado a ella, a encontrar paz, sentido a su vida, debido a que tenía su corazón muy herido.
Recordé a Azzurra, de Venecia, de igual manera, ella abrió su corazón en el comedor, se sentó junto a mi mesa, dijo los motivos de su viaje a Roma. Me percaté de su elevado nivel intelectual. Abordamos el tema de las diferentes corrientes, modas; tales como: aborto, ideología de género…. que se extienden como un cáncer en la humanidad, despersonalizando al ser humano con sus argumentos fuera de toda lógica y realidad. Evidenciado en las propias conductas de quienes los ejercen. Enlazado al tema, ella apuntó el argumento de las heridas del alma, curiosamente comento; haber asistido a una hora santa de sanación a la cual, asistiría con frecuencia, luego de haber percibido el bienestar espiritual en el que se siente ahora. Acentuó tengo mi corazón “molto ferito” muy lacerado. Poco a poco, comienza a sanar con las misas mencionadas.
Aprecio, admiro la humildad de las protagonistas de mi artículo. Ellas reconocieron su necesidad de sanar el peso del bagaje, del equipaje de emociones destructivas que cargan consigo mismas; debido a la falta de, un descubrir el lado sabio de sus amargas vivencias. Hasta la muerte de un ser querido, luego de su sabio proceso, se convierte en una experiencia de riqueza de frutos espirituales, una vez que identificamos los mensajes muy personales que nos envía la inteligencia de Dios y la vida. Estos tesoros se entregan a las almas dóciles, su pequeñez sumado a su aceptación, es la llave que abre el razonamiento y la mente a un mundo que nos eleva a unos estados de esperanza inimaginables, indescriptibles y descriptibles sólo para quien los vive. Es la lindura de Dios, y Dios mismo en el corazón de la persona. Que transforma todo dolor en amor.
Mujer, el mejor regalo, herencia que puedes dejar a tus hijos, a tu descendencia: es sanar los eventos que desgarraron tu alma, aquellos que lentamente te arrancaron en pedazos tu majestuosa identidad, robaron tu preciosa verdad; confundiéndote en la mentira de su penumbra. No eras consciente, estos hechos te programaron a la autodestrucción de tu ser, potenciaron tu ego, aniquilaron lo más sublime de tu corazón, la virtud que te hace resurgir cada día como una rosa en plenitud, que destila el perfume de todo su encanto. Mujer, te multiplicas en tus hijos en el odio, o, en el amor. Despréndete del pasado y el hubiera. Da, incondicionalmente en el buen sentido de la palabra, sin esperar. Al practicar este precepto, tu entorno será lleno de abundancia, riqueza, prosperidad. Al perdonar de igual forma, tu atmosfera será bendita y hasta la última célula de tu cuerpo y neurona de tu cerebro se transformará en paz, armonía y salud.
Mayores informes, seminarios y conferencias: www.grandezaydignidad.org , YouTube Rosa María Ordaz “el esplendor de la palabra”, IVOOX Rosa María Ordaz, YouTube, Rosa María Ordaz “mundo católico” Facebook Rosa María Ordaz.