Conviviendo un mes con el Sagrado Corazón de Jesús
Día 10°
Día de Humildad
No debemos extrañarnos ni desalentarnos de nuestras miserias, pues nos atraen la compasión y la misericordia de Dios… El sabe servirse de nuestras flaquezas. Mientras más profunda es nuestra miseria, mas grande es su misericordia.
“Cuando un alma comete grandes pecados, pero después se humilla, sale ganando, mas la soberbia es lo que enoja mucho a mi Padre. Consuélame con tu humildad, porque donde hay humildad toda va bien, pero donde no la hay todo va torcido”.
No temas ningún camino, ni “condición humillante”. Nuestro Señor no rehusó la humillación, antes se abrazó con ella para expiar los pecados de soberbia… quizá los tuyos… acompáñale en el camino de la humildad… ayúdale a reparar la soberbia de las almas… y la tuya.
“no olvides que sin Mi, el alma es un abismo de miserias, Yo levantare a los humildes… no me importan tus miserias y caídas, quiero humildad y amor. Cuando más pequeña y humilde seas estarás más cerca de Mi”.
Si eres humilde, El te levantara… y te levantara a la altura de su Corazón… del abismo de tu miseria, pasarás al abismo de su amor.
Corazón de Jesús:
Que mi humildad consista “en seguir las inspiraciones de la gracia sin dejarme llevar de las sugestiones del amor propio.”