Billete Celador –Un Mensaje para Ti Guardia de Honor-
Presencia de Cristo en la vida del cristiano…
Parroquia San Pío X
… Id, pues, y enseñad a todas las gentes… yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.
Mateo 28, 19-20
“id y enseñad… el anuncio de los profetas de la universalidad de la salud mesiánica llego ya. Los apóstoles debían llevar su mensaje evangélico “enseñad” y su renovación e incorporación a su reino “bautismo a todas las gentes, a todo el mundo. Pero, no es suficiente oírlo y aceptar el Evangelio predicado por sus apóstoles, como misión y continuación de la obra de Cristo, es preciso predicarlo. La fe sin las obras, según las palabras de Jesucristo, no es cristianismo.
La unidad de las Tres Divinas Personas es esencia en Dios, imitemos esta unidad con nuestra santa Iglesia.
¡Enseñad, vocación de todo cristiano! No separados, no cada uno por su cuenta, sino, en la unidad de todos los miembros, teniendo como cabeza y centro a Jesucristo ¡En total obediencia! ¡Así, en la unidad el mundo creerá! ¡Jesucristo nunca se predica así mismo! ¡Su misión dar a conocer al Padre!
Estas últimas palabras del Evangelio nos muestran la presencia y la acción de Cristo resucitado, en la vida de la Iglesia y en La vida del cristiano ¡promesa que Cristo ha cumplido y que debe bastar a todos los cristianos para sentir su cercanía en la misión, en lo cotidiano… en todo momento de nuestra existencia! Esta presencia de Cristo es garantía que obrara en cada oyente, maravillas realizara en cada corazón ¡Su Presencia infunde valor, fuerza… todo lo necesario para la misión! ¡Presencia que llena al apóstol, que no busca nada ni a nadie! ¡Solo llevar a cabo su misión, llevar a Cristo al más alejado! Vivir en la Presencia de Cristo da sentido a la misión, motiva al apóstol, al cristiano a darlo todo, sin escatimar tiempo, sin egoísmos, sin anteponer los propios intereses… más bien en busca de la verdadera perfección y del servicio legitimo de no sea buscarse así mismo sino llevar a Cristo a todos. Todos los días es tiempo de predicar a Cristo, quizás el lugar no sea donde nosotros deseemos ¡la austeridad, la distancia, eso no importa, lo que sí es llevar a Cristo, especialmente al que sufre por la indiferencia del hombre que cierra sus entrañas a la caridad! Dándolo a conocer de la manera más sencilla, a través del Amor y la misericordia que nunca se agota, porque el Señor es esplendido. Esta es la misión de todos, que Cristo sea conocido y amado. Siempre dando lo mejor de sí mismo, sin lucimientos, honores, sin buscar aprecios humanos, ni en busca de sus propios intereses. El que ama a Cristo no piensa en nada de esto solo en hacer la Voluntad de quien le envía, no tiene tiempo para pensar en nada que no sea la misión encomendada. Cada día es una nueva oportunidad para disfrutar de esta presencia de Jesucristo en la vida cotidiana… sin aprecios personales más bien despojado de todo lo que le impida esponjarse en el Amor.
Mamita María, es un honor poder servir a tu Hijo Jesucristo, ser portador de la alegría, del amor, y tener el privilegio de ser hijo de Dios, no tiene medida su Amor… nuestra confianza en el Señor esta en dejarse moldear, en abandonarse para entregarse en el servicio, pues todas sus promesas las ha cumplido, el dará a su servidor lo necesario en la misión, ayúdanos Madre a trabajar siempre en la unidad con nuestros Pastores y con nuestra Santa Iglesia. Así como la Santísima Trinidad es una con un mismo corazón, mente y obras.
En acción de gracias por los 50 años sacerdotales de nuestro querido Obispo emérito Juan Frausto Pallares, Padre Eduardo Contreras, Padre José Salazar, Dios les colme de bendiciones.
Por la intención Universal del Santo Papa Francisco: por la evangelización: para que los fieles laicos cumplan su misión específica poniendo su creatividad al servicio de los desafíos del mundo actual. Que el Espíritu santo sea invocado por toda la Iglesia, para que nos conceda sus dones. Que los fieles cristianos tomemos conciencia de nuestros compromisos bautismales. Que sirvamos a Cristo, nuestro Señor, de una manera creativa y fiel al mismo tiempo
Por todos los Obispos de CEPS, Dios los ayude en todas sus necesidades.
Por nuestro Arzobispo Alfonso Cortés, Monseñor Juan Rodríguez Alba, Hugo Pérez, Emmanuel Ayala, Silverio Chávez, Eduardo Contreras, Antonio Borja, Isidro Baltasar Nicasio, Juan Manuel Fernández, Mario García y todos los sacerdotes para que crezcamos en la fe, la esperanza y la caridad
Oremos por todas las necesidades de nuestra Iglesia en especial por: santo Papa Francisco, Papa Emérito Benedicto XVI, Cardenal Arzobispo Primado de México Carlos Aguiar Retes, Arz. Alfonso Cortes Contreras, Arz. Emérito José Guadalupe Martin Rabago, Obispo Juan Pallares, P: Eduardo Contreras, P. Juan Rodríguez Alba, P. Isidro Baltazar Nicasio Zamora, P. Jorge Espinoza, P: Apolinar, P. Mario García, P. Juan Manuel Fernández, P. Silverio Chávez Ayala, P. Carlos Valadez, P. Andrés García, P. Hugo Pérez Flores, Hugo Landeros, P. Antonio Borja, P. Chuchin Salazar, P. Carlos Flores Montiel, P. Arturo Márquez, P. Víctor Manuel, P. Fidel, P. Valentín; P. José López, P. Carlos Muñoz, P. Emmanuel Chávez, P. Claudio, P. Guillermo Medina, P. Raúl González, Padre Antonio Valenzuela, P. Francisco Javier Hernández Méndez, Diáconos todos Religiosos y Religiosas: visitandinas: hna. Amelia Negrete, sacerdotes, seminaristas: Horacio de Jesús García Ruiz y obispos del mundo.
Celadores del Santísimo Sacramento y Guardias de Honor del Sagrado Corazón de Jesús.
Ministerio de Consagración Corazones de Jesús y María.
Por el éxito del Encuentro juvenil
Por todos los incrédulos para que el Espíritu Santo los inflame en su amor.
Por todos los enfermos graves que se encomiendan a nuestras pobres oraciones.
Por las necesidades de todas las familias del mundo.
Por la paz en todo el mundo. Por todos los gobernantes del mundo luchen por el mas necesitado.
Por todos nuestros hermanos de Siria, Venezuela, Nicaragua, Colombia, Paraguay… para que Dios les ayude en todas sus necesidades.
Por todos nuestros fieles difuntos en especial Por: sacerdotes difuntos, y Guardias de Honor del Sagrado Corazón de Jesús y todas las almas del Purgatorio.