Jesús, Concede que nuestros ojos y nuestro espíritu puedan contemplarte, como nuestro verdadero Rey y Salvador, prenda certísima de alianza eterna.
Has que podamos contemplar plenos de confianza, amor, ternura y gran serenidad tu Corazón.
Tú conoces nuestras debilidades, incapacidades para hacer frente a nuestros deberes que penden sobre nosotros, conoces la angustia en que permanecemos prisioneros de nosotros mismos y de nuestras preocupaciones.
Las dificultades nos abaten y hacen incierto nuestro vivir, olvidándonos de Ti
Por el misterio de tu cruz, danos libertad, llévanos por el camino de confianza y fe en Ti
Jesús, concédenos contemplar tu costado traspasado.
Para que conociendo tu Amor, aprendamos amarcomo Tú.
