MIÉRCOLES DE CENIZA
Envío de los Misioneros de la Misericordia en la Basílica de San Pedro, en Roma
“ENLUTEN SU CORAZÓN Y NO SUS VESTIDOS”
Esto dice Yavé: “Vuelvan a mí con todo corazón, con ayuno, con llantos y con lamentos.
Rasguen su corazón, y no sus vestidos, y vuelvan a Yavé su Dios, porque él es bondadoso y compasivo; le cuesta enojarse, y grande es su misericordia; envía la desgracia, pero luego perdona.
¡Quién sabe si volverá atrás y nos perdonará y hará producir de nuevo a nuestros campos, de los cuales sacaremos las ofrendas para Yavé!
Toquen la trompeta en Sión, promulguen un ayuno sagrado y llamen a concejo.
Congreguen al pueblo, reúnan a los ancianos y que todos se purifiquen. Traigan también a los pequeños y a los niños de pecho, y que los recién casados dejen su cama.
En el patio del santuario lloren los sacerdotes ministros de Yavé y digan: “¡Yavé, perdona a tu pueblo, y no lo entregues al desprecio y a la burla de las naciones! ¿Acaso permitirás que los paganos digan: dónde está su Dios?”
Yavé se mostró lleno de celo por su tierra y tuvo piedad de su pueblo.
PALABRA DE DIOS.- TE ALABAMOS, SEÑOR.
Tú, Señor te compadeces de todos y no aborreces nada de lo que has creado, aparentas no ver los pecados de los hombres, para darles ocasión de arrepentirse, porque tú eres el Señor, nuestro Dios.
Concédenos, Señor, emprender este tiempo el combate cristiano con santos ayunos, para que en el momento de combatir contra las tentaciones, seamos fortalecidos con los auxilios de la penitencia. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que contigo vive y Reina en Unión con el Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México.
gracia por hacer que todos los días antes de iniciar mi trabajo primero me alimente de la palabra de dios