“EL QUE AMA A DIOS, QUE AME TAMBIÉN A SU HERMANO”.
Queridos hijos:Amemos; pues, ya que él nos amó primero.
Si uno dice “Yo amo a Dios”, y odia a su hermano, es un mentiroso. Si no ama a su hermano, a quien ve, no puede amar a Dios, a quien no ve.
Pues éste es el mandamiento que recibimos de él: el que ama a Dios, ame también a su hermano.
Todo el que cree que Jesús es el Mesías ha nacido de Dios. Si amamos al que da la vida, amamos también a quienes han nacido de él;”
y por eso, cuando amamos a Dios y cumplimos sus mandatos, con toda certeza sabemos que amamos a los hijos de Dios.
Amar a Dios es guardar sus mandatos, y sus mandatos no son pesados.
Todo lo que ha nacido de Dios vence al mundo, y la victoria en que el mundo ha sido vencido es nuestra fe.
PALABRA DE DIOS.- TE ALABAMOS, SEÑOR.
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México.