DOMINGO II DE ADVIENTO
“MANTÉNGANSE LIMPIOS E IRREPROCHABLES PARA EL DÍA DE CRISTO”.
Hermanos, siempre están en mis oraciones, pido por todos ustedes a cada instante. Y lo hago con alegría,
recordando la cooperación que me han prestado en el servicio del Evangelio desde el primer día hasta ahora.
Y si Dios empezó tan buen trabajo en ustedes, estoy seguro de que lo continuará hasta concluirlo el día de Cristo Jesús.
Bien sabe Dios que la ternura de Cristo Jesús no me permite olvidarlos.
Pido que el amor crezca en ustedes junto con el conocimiento y la lucidez.
Quisiera que saquen provecho de cada cosa y cada circunstancia para que lleguen puros e irreprochables al día de Cristo,
habiendo hecho madurar, gracias a Cristo Jesús, el fruto de la santidad. Esto será para gloria de Dios .
PALABRA DE DIOS.- TE ALABAMOS, SEÑOR.
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México