“LOS CIELOS PROCLAMAN LA GLORIA DE DIOS”.
Los cielos cuentan la gloria del Señor,
proclama el firmamento
la obra de sus manos.
Un día al siguiente le pasa el mensaje
y una noche a la otra se lo hace saber.
No hay discursos ni palabras
ni voces que se escuchen,
mas por todo el orbe se capta su ritmo,
y el mensaje llega hasta el fin del mundo.
Con tu sangre compraste para Dios hombres de todas las razas y lenguas, de todos los pueblos y naciones, para constituir un reino para Dios.
Señor Dios, que redimiste a todos los hombres con la preciosa Sangre de tu Unigénito, conserva en nosotros la obra de tu misericordia, para que, celebrando sin cesar el misterio de nuestra salvación, merezcamos alcanzar sus frutos. Por nuestro Señor Jesucristo, , tu Hijo, que reina contigo en el cielo, en unidad con el Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos, de los siglos. Amén
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México