Billete Celador –Un mensaje para Ti Guardia de Honor-
El Sordomudo…
Parroquia de San Pío X
Se marcho de la región de Tiro y vino de nuevo, por Sidón, al mar de Galilea, atravesando la Decápolis. Le presentan un sordo que, además, hablaba con dificultad, y le ruegan imponga la mano sobre él. Él, apartándole de la gente, a solas, le metió sus dedos en los oídos y con su saliva le tocó la lengua. Y, levantando los ojos al cielo, dio un gemido, y le dijo: “Effatá” que quiere decir: “Ábrete” Se abrieron sus oídos y, al instante, se soltó la atadura de su lengua y hablaba correctamente. Jesús les mando que a nadie se lo contaran. Pero cuanto más se lo prohibía, tanto más ellos lo publicaban. Y se maravillaban sobremanera y decían; “Todo lo ha hecho bien; hace oír a los sordos y hablar a los mudos.”
Marcos 7, 31-37
San Juan Crisóstomo: se enumeran aquí dos deficiencias muy grandes: La sordera y la mudez, como símbolos de dos mayores enfermedades del espíritu: no oír la palabra de Dios, y no celebrar las alabanzas divinas. Quien no oye esa palabra tiene pobreza y tinieblas en el espíritu; quien no usa la lengua para el canto de las divinas alabanzas, no tiene alegría en el corazón. Si el hombre no tiene reverencia para los dones de Dios, si no le engrandece con el amor o con el canto, si no se anonada en el conocimiento de su vileza e indignidad, es culpable de ingratitud; entonces no desciende el roció de la misericordia, no rebosa la fuente de la divina piedad, no fluye la corriente de la gracia, y su alma enervada se arruina con su pobreza.
Demos gracias a Dios por estos dos dones y hagamos buen uso de ellos.
¡¡¡Las palabras de Cristo tienen poder sanador!!! Capaz de realizar milagros, dar la vida; Él lo puede todo. Lo que para el hombre es imposible para Él es posible. Su gemido…primero, oro al Padre, para que se realizara en este hombre la Voluntad divina e infunde en él, el don del Espíritu Santo. ¡Qué humildad! ¡Qué fortuna para este hombre! Estaba privado de la gracia; ahora obtiene de Jesús este don tan maravilloso, ¡poder expresar con viva voz, no solo su sentir, su alegría sino también poder anunciar el amor y la misericordia con que Jesús le ha sanado.
Su Palabra merece ser escuchada.
Las palabras de Cristo continúan transformando, sanando… hombres en todas partes del mundo: ablanda los corazones empedernidos por el pecado, da la vista a los ciegos que se niegan a ver los signos de Dios, abre los oídos a los sordos que se cierran a escuchar el llamado de Dios, mudos que se avergüenzan de hablar de la verdad, levantando a los paralíticos que se niegan avanzar en el servicio, amor y la vida espiritual, otros, impulsados por el Espíritu a los lugares más alejados llevando la Palabra divina … Es el Espíritu de Dios el que trabaja en nosotros.
Sin una relación personal con el Señor, nuestra religiosidad puede llegar a ser como un titulo, adorno o, lo que sería peor, un punto de apoyo para unas convicciones fanáticas que atropellan los derechos de los demás. Por eso es indispensable vivir un encuentro personal con Dios, con quien nos topamos todos los días, si abrimos los ojos y escuchamos su voz que nos pide misericordia con el hermano que sufre.
Necesitamos una vida orientada por Dios, que solo se obtiene a través de su Palabra, oración y las obras.
Muerte y vida están en poder de la lengua
La lengua revela el interior del hombre, las obras deben corresponder a sus palabras. “no amemos de palabra ni con la lengua, sino con obras y de verdad.”
En acción de gracias por la salud de: Teresa Pliego, Luz estela Giraldo, Ángeles Velázquez, Ma. Esther Guerra, Graciela Guerra y +Marcela Ruiz Jimeno por su eterno descanso.
Oremos por todas las necesidades de nuestra Iglesia en especial por: santo Papa Francisco, Papa Emérito Benedicto XVI, Arz. Alfonso Cortes Contreras, Arz. Emérito José Guadalupe Martin Rabago, Obispo Juan Pallares, por todos los Obispos y sacerdotes del mundo en especial por: P: Eduardo Contreras, P. Juan Rodríguez Alba, P. Mario García, P. Juan Manuel Fernández, P. Silverio Chávez Ayala, P. Rafael, P. Martin Tafolla, P. Jorge Claudio, P. Hugo Landeros, P. Arturo Pérez Márquez, P. Antonio Borja, P. Arturo Espinoza Rico, P. Jorge Avalos, P. Chuy Salazar, P. Carlos Muñoz F., P. Chuy Reyes, P. José López, P. Valentín Garibay, P. Joel Padrón González, P. Juan María Huerta Muro, P. Roberto Velázquez, P. Cástulo Zavala, P. Eduardo Córdova, Párroco Tomas M. Zielinski, P. Juan Desiderio Espinoza, P. Miguel Domínguez, P. Leo Patlán, Diáconos: Emmanuel Ayala, Arturo, por todos los seminaristas en especial por Francisco Idalino Servin Medina, Diego Antonio Álvarez Ibarra, Alfredo Moreno, Miguel Ángel Arellano del Río, por todas las órdenes religiosas, vocaciones sacerdotales, Misioneros, Diáconos, todas las autoridades eclesiales, Ministros Extraordinarios de la Sagrada Comunión, todos los Ministerios en especial Catequesis infantil, Familia, Comunidades, Epso Caritas, Evangelización, Liturgia, Música, Ministerio de Jóvenes, Pastoral de la Salud, Visitan la Cárcel, Armada blanca y todos los Servidores de la Iglesia.
Celadores del Santísimo Sacramento y Guardias de Honor del Sagrado Corazón de Jesús.
Oremos por la salud de nuestros hermanos enfermos en especial por: P. Raúl, Angelina Hernández (diabetes) Raquel Hernández (corazón y diabetes) Alfredo Hernández (corazón) Estanislao Ávila Beltrán, Beatriz Fernández Ortiz (cáncer) P. Juan Manuel Fernández, Pedro Gómez Lona, Josefina Guerrero García, Nicolás Guerrero, Evelia Gómez G.
Por las necesidades materiales y espirituales de: Maricela Villa Moreno, Guillermo, Aldo Yafrery Muñoz Maldonado, Elvira Gómez Guerrero, Victoria, Ana Luz, Oscar Isaías, Claudia Carolina, Arturito, Josefina Gómez, Irma Alicia Gómez, Jacqueline, MA. Guadalupe Quintero Pulido.
Oremos por la Paz en todo el mundo.
Por todos los que sufren injustamente una condena en la cárcel.
Por todos los migrantes en todo el mundo para que la divina Providencia los bendiga en todas sus necesidades.