MISA DE SANTA MARÍA EN SÁBADO.
“LES MANDÓ QUE NO LO PUBLICARAN, PARA QUE SE CUMPLIERA LA PALABRA DEL PROFETA”.
Al salir, los fariseos planearon la manera de acabar con él.
Jesús lo supo y se alejó de allí, pero muchas personas lo siguieron, y él sanó a cuantos estaban enfermos.
Pero les pedía insistentemente que no hablaran de él.
Así debían cumplirse las palabras del profeta Isaías:
Viene mi siervo, mi elegido, el Amado, en quien me he complacido. Pondré mi Espíritu sobre él, para que anuncie mis juicios a las naciones.
No discutirá, ni gritará, ni se oirá su voz en las plazas.
No quebrará la caña resquebrajada ni apagará la mecha que todavía humea, hasta que haga triunfar la justicia.
Las naciones pondrán su esperanza en su Nombre.
PALABRA DEL SEÑOR.- GLORIA A TÍ, SEÑOR JESÚS.
ORACIÓN: Dichosa tú, Virgen María, que llevaste en tu seno al Creador del universo; diste a luz al que te creó, y permaneces Virgen para siempre.- Concédenos, Dios Misericordioso, auxilio en nuestra fragilidad, para que, quienes celebramos la conmemoración de la Santa Madre de Dios, con la ayuda de su intercesión nos veamos libres de nuestras culpas. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México