Salmo 41(42) 1-2;43,3-4. Lunes 9 de Marzo de 2015.
“ESTOY SEDIENTO DEL DIOS QUE DÁ LA VIDA”.
Como anhela la cierva estar junto al arroyo,
así mi alma desea, Señor, estar contigo.
Sediento estoy de Dios, del Dios de vida;
¿cuándo iré a contemplar el rostro del Señor?”
Envíame tu luz y tu verdad:
que ellas sean mi guía
y a tu santa montaña me conduzcan,
al lugar donde habitas.
Al altar de Dios me acercaré,
al Dios de mi alegría;
jubiloso con arpa cantaré
al Señor, mi Dios.
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México
Yo quisiera saber cual es la reflexion de los dos salmos, estoy enpese do a estudiar la Biblia y abeses entiende muy poco