De la carta del Apóstol San Pablo a los Efesios 6,1-9. Miércoles 29 de Octubre de 2014.
“OBEDEZCAN COMO QUIEN SIRVE AL SEÑOR Y NO A LOS HOMBRES”.
Hijos, obedezcan a sus padres, pues esto es un deber: Honra a tu padre y a tu madre.
Es, además, el primer mandamiento que va acompañado de una promesa:
para que seas feliz y goces de larga vida en la tierra.
Y ustedes, padres, no sean pesados con sus hijos, sino más bien edúquenlos usando las correcciones y advertencias que pueda inspirar el Señor.
Siervos, obedezcan a sus patrones de este mundo con respeto y responsabilidad, con corazón sincero, como quien obedece a Cristo.
No se fijen en si son vigilados o si ganarán consideración, pues ustedes son siervos de Cristo que hacen con gusto la voluntad de Dios.
Hagan su trabajo con empeño, por el Señor y no por los hombres,
sabiendo que el Señor retribuirá a cada uno según el bien que haya hecho, sea siervo o sea libre.
Y ustedes, patrones, actúen con sus siervos de la misma manera y dejen a un lado las amenazas; tengan presente que ellos y ustedes tienen en el cielo un mismo Señor, y que ése no hace distinción de personas.
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México
Buenos dias, Hay que dedicarle tiempo a los ni;os y la familia, ellos son el futuro de humanidad.
bien dice la palabra los padres no son eternos hay que cuidarlos en la ancianidad hay que ser tolerantes hay que escucharlos por que un dia callaran para siempre y despues nos daran ganas de escuchar su voz y ya no va a ser posible