SANTA ISABEL DE HUNGRÍA
Etimológicamente significa “juramento de Dios”. Viene de la lengua hebrea.
Isabel nace el 7 de julio del año de 1207, en Hungría, su padre era Andrés II rey de Hungría y de Gertrudis la primera esposa de Andrés, su padre la compromete en matrimonio con el joven Luis, hijo de los duques de Turingia. Y esto se hace realidad a los 14 años, cuando contrajo matrimonio. Aunque eran muy jóvenes en realidad si existía ese sentimiento de amor entre ellos y se veía que se querían bastante.
Isabel de una fe profunda, solía repetir frecuentemente una frase:” La piedad divina no suprime el afecto humano sin que lo engrandece”.
La vida religiosa le atrajo cuando llegaron los misioneros franciscanos a Alemania y estos mostraban a Cristo y la figura de San Francisco de Asís, le impresionó mucho su vida y se empezó a dedicar a los pobres.
En el año de 1227 pierde a su amado esposo cuando se disponía para embarcar a una Cruzada. Queda viuda a los 20 años de edad, estaba embarazada de su tercer hijo, tiempo que fue duro y difícil para ella.
Sus familiares querían que se casara de nuevo a lo cual ella se negó y fue echada junto con sus tres hijos del castillo y mandada a una vil casa, sin embargo no todo era negativo pues su tío era el obispo de Bamberg y puso sosiego a la situación familiar, los duques se encargaron de sus nietos y ella ingreso a la orden franciscana
Todos los bienes y posesiones los vendió y los regalo a los pobres y mando a que construyeran una casa-hospital, para asistencia del más necesitado, la ternura y dulzura de su persona queda grabada en esa época cuando muere en el año de 1235 a la edad de 24 años.
Linda historia de una santa ejemplar y admirable digna de imitar y de venerar.