SAN FRANCISCO PALAU
Etimológicamente significa “franco, valiente”. Viene de la lengua alemana.
Nació en Aitona, Lérida el 29 de diciembre en el año de 1811, este santo nace en el seno de una familia pobre pero de una sólida formación. Con mucho esfuerzo y dedicación logro terminar su educación secundaria y es cuando sintió la vocación y el s deseo de ser sacerdote. Pide ser admitido en el seminario carmelita donde se formo religiosamente.
Cuando recibió la ordenación sacerdotal se entregó al apostolado con ilusión y esmero, pero debido a situaciones extras, vive desterrado en Francia durante 12 años y posteriormente fue enviado a Ibiza.
Su apostolado del sacerdocio empieza a dar frutos , aun con la soledad del exilio, logra dos grandes obras inspiradas por el Espíritu Santo, funda dos congregaciones:” Las Hermanas Carmelitas Misioneras y Hermanas Carmelitas Misiones Teresianas”.
Su exilio termina cuando la Reina Isabel ordena que regrese a España, este santo obraba grandes milagros aun que no era experto en medicina, es decir un doctor.
Su gran espiritualidad se centra en la lucha evangélica por la paz, la verdad y la libertad, y todo ello se logra con la íntima unión con Dios y con su Iglesia.
Grandes virtudes Dios da a este santo, su entrega a la oración, a la predicación, la catequesis, los exorcismos y los libros. Su gran inclinación pastoral fueron los pobres, los enfermos, los niños, jóvenes y familias.
Para los carmelitas deja un vivo ejemplo a seguir, sus hijas carmelitas, tratan de mil y una maneras el intentan imitar su vida atendiendo todo aquello que les propone la urgencia del Evangelio, cimentado en la caridad apostólica en bien de los demás.
