Del libro de los Jueces 9,6-15. Miércoles 21 de Agosto de 2013.
“USTEDES DIJERON: “QUE REINE UN REY SOBRE NOSOTROS” SIENDO ASÍ QUE SU REY ES EL SEÑOR”.
Entonces todos los notables de Siquem y de Bet-Milló se reunieron y proclamaron rey a Abimelec, cerca de la Encina de la Estela, que está en Siquem.
Le comunicaron la noticia a Yotam. Este subió a la cima del monte Garizim y desde allí gritó con todas sus fuerzas: “¡Escúchenme, notables de Siquem y Dios los escuche!”
Un día salieron los árboles en busca de un rey. Dijeron al olivo: ¡Sé tú nuestro rey!
Pero el olivo les respondió: ¿Tendré que dejar mi aceite, tan apreciada por los dioses y los hombres, para ir a balancearme por encima de los demás árboles?
Los árboles se dirigieron entonces a la higuera: ¡Ven, tú serás nuestro rey!
La higuera les respondió: ¿Tendré que renunciar al dulzor de mi fruta tan apreciada para ir a balancearme por encima de los demás árboles?
Luego los árboles fueron donde la vid: ¡Ven, tú serás nuestro rey!
Pero la vid les respondió: ¿Tendré que renunciar a mi uva, que tanto alegra a los dioses y a los hombres, para ir a balancearme por encima de los árboles?
Entonces los árboles fueron a buscar a la zarza espinosa: ¡Ven, tú serás nuestro rey!
Y la zarza espinosa respondió a los árboles: “Si realmente quieren hacerme rey y que los mande, vengan y quédense bajo mi sombra. Si no, saldrá fuego de la zarza espinosa y devorará hasta el cedro del Líbano.
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México