Los pobres de Jesús sin la buena nueva.

¿Usted qué opina?: ¿es un acto de amor o compasión que le hayan anunciado la buena nueva?, seguramente la respuesta puede incluir las dos interrogantes, sería un acto de amor llevarle a que escuche la buena nueva porque casi se puede afirmar que ha sido lo más hermoso que le haya pasado y quizá usted esté viviendo los momentos más sobrios de su vida y en segundo lugar sería un acto de compasión el que le hayan anunciado la buena nueva ya que le han sacado de las tinieblas y privación del amor de Dios y la plenificación de su persona.

Profundice un poco… ¿cuánta gente habrá muerto sin haber recibido el anuncio gozoso de la buena nueva que Jesucristo nos ha traído?, ¡millones de hermanos!, ¡una gran desgracia!; no es de asombrarse que Cristo Jesús haya empezado su sermón de la montaña anunciando la buena nueva a los pobres: Mt 5:3 “Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos. “Los pobres de Jesús” tan cuestionados, ¿serán los que viven como mendigos?, ¿los que no pueden cubrir las necesidades básicas, los que están incompletos?, ¿los marginados de su ciudad, aldea, sociedad?, ¿los ignorantes?, ¿los que sufren enfermedades demoledoras?, ¿los que han recibido una justicia mediocre?, ¿el débil?, ¿los encarcelados?, ¿los indefensos?, ¿los discapacitados?, ¿el que carece de algo?, en el lenguaje coloquial sería el que no le alcanza el dinero aun trabajando para cubrir sus necesidades de supervivencia.

Dependiendo de la percepción de la pobreza humana, para Jesús son los más importantes los pobres y no es que el rico económicamente sea hecho a un lado, Moisés les recuerda a los israelitas: Exo 22:24 Si prestas dinero a alguien de mi pueblo, a un pobre que habita contigo, no serás con él un usurero; no le exigirás intereses. El israelita pobre es aquel que no tenía tierras o bienes que le dieran solvencia moral: Amo 8:4 Escuchad esto los que pisoteáis al pobre y queréis suprimir a los humildes de la tierra. Cada país vive una pobreza difícil de erradicar, millones de dinero destinados a combatir la pobreza y muchos comentarios de analistas de como vencer la pobreza; a muchos hombres y mujeres les gusta la pobreza y la vida que llevan porque siempre han vivido así, ¿Qué de raro tiene vivir así?, se podría decir que la pobreza se introduce en la medula de los hombres y permanece ahí, la pobreza del hombre se arraiga en la cultura de los hombres.

Cristo Jesús, ¡no puede dejar sin el anuncio de la buena nueva a los pobres!, no los puede dejar condenados a su pobreza que viva, por amor, Dios ha enviado esa buena noticia y por compasión al hombre se le envía la buena nueva porque Dios sabe que el hombre no puede salir de esa pobreza por sí mismo y se podría cuestionar: ¿y qué le importa a un pobre que le anuncien la buena nueva, en que le beneficia cuando su estomago esta vacio?, ¿la buena nueva le va a sacar de pobre?, ¿la buena nueva va a erradicar la pobreza?, observemos una realidad ignorada y empolvada… ¿sabe usted lo que es una restitución de su dignidad?, la dignidad es lo que da valor a un hombre, la buena nueva le restituye el valor que usted tiene, ¿cree que el pobre se siente muy valioso? ¡en absoluto!, la buena nueva concentra el valor integro de un hombre y una mujer, la pobreza de dignidad desaparece inmediatamente, aquel hombre se dispone a enfrentar la vida con todo su valor, “ante un panorama que brilla con esperanza”.

¿Sabe usted que es sentirse amado, estimado querido?, ¿cree que el enfermo de cáncer se sienta amado, se sienta con muchas ganas de vivir porque es querido?, ¡no!, sufre por su enfermedad, siente injusticia, se siente el pobre más pobre porque no puede hacer nada contra ese cáncer, ¡por qué no se lo da a los maleantes sí él se porta bien!; la buena nueva le restituye el amor perdido al hombre, las relaciones de amor con Dios se restablecen, un hombre amado es capaz de luchar aun con cáncer, aun con la pérdida de un ser querido.

¿Sabe usted que es vivir en las tinieblas, sumido en una sombra que no deja ver con claridad?, la buena nueva hace caer el velo, las escamas que se han formado en los ojos tanto físicos como del alma, sí, es extraordinario ver con nitidez cuando se gradúan perfectamente las gafas, ¿qué será cuando brilla la luz de la verdad en la vida de un hombre?, sí Cristo dejará a los pobres sin la buena nueva sería como condenarlos eternamente a vivir sumidos en un hoyo oscuro sin fe, sin esperanza y amor. Mc 16:15 Y les dijo: “Id por todo el mundo y proclamad la Buena Nueva a toda la creación. Es un mandato que la Iglesia debe de llevar a los hermanos, la carestía de alimento, de vestido, de techo, de educación puede erradicarse cuando el hombre ha sido restituido en su condición humana, en su valor integral y así puede actuar con una nueva estructura emocional, espiritual, religiosamente y culturalmente, los ejemplos del evangelio hablan de esa restitución que la buena nueva hace: a Leví (Mateo) lo restituyo a una vida digna (publicano) y nunca más vivió sumido en los apegos, a Zaqueo de igual manera, nunca se sintió tan feliz y tan libre de culpa que su conversión garantiza el efecto de la buena nueva, a María Magdalena le expulsó los males que la denigraban y nunca más gasto su tiempo en vanidades, a la samaritana le transformó la vida y nunca más tuvo sed de buscar que el mundo le diera para saciarse.

Los apóstoles forman parte de los “pobres de Jesús” y vivieron tan felices sus días que dieron su vida para seguir disfrutando de la buena nueva en la eternidad, el centurión vivió creyendo en una vida mejor aún formando parte de un yugo (romano), la hemorroisa se había gastado todo su dinero, pero la salud no llegaba y de ahí en adelante vivió una salud de amor; se pueden poner más y más ejemplos del efecto de la buena nueva, pero… el más convincente es el de usted, su testimonio es la garantía, ¿es parte de los pobres de Jesús?, ahora ya sabe de porque la Iglesia siga proclamando la buena nueva. Sí Jesús, no huera salido a su encuentro sería el ser más desgraciado, más pobre, condenado a repetir lo mismo y lo mismo. Por esa razón la buena nueva no pasa de moda, ni caduca, ni es efímera, ¡no hay nada mejor!: Fil 3:8 Y más aún: juzgo que todo es pérdida ante la sublimidad del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por quien perdí todas las cosas, y las tengo por basura para ganar a Cristo.

Ahora podemos resumir: “pobre del pobre que vive pobreza y no es sacado de su pobreza”; un pobre sin la buena nueva es verdaderamente pobre. Gracias que Cristo Jesús nunca se ha dejado influir por la pobreza del hombre sino más bien se motiva, para sacar de la pobreza al pobre; la carestía de bienes hace infeliz al hombre, teniendo en su vida la buena nueva todo es felicidad aun con una pobreza del mismo hombre, el pobre se convierte en el hombre más dichoso, por eso Jesús se lo expresa para que nunca se olvide y se borre de la mente, además de forma parte del equipo “pobre de Jesús”:

Mt 5:3 “Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos.
Mt 5:4 Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la tierra.
Mt 5:5 Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.
Mt 5:6 Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados.
Mt 5:7 Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
Mt 5:8 Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.
Mt 5:9 Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
Mt 5:10 Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos.
Mt 5:11 Bienaventurados seréis cuando os injurien y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa.
Mt 5:12 Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en los cielos; pues de la misma manera persiguieron a los profetas anteriores a vosotros.