¿Corpus Christi, realidad salvadora o simple celebración de la Iglesia?

¿Corpus Christi realidad salvadora o simple celebración de la Iglesia?

La Iglesia católica celebra el día de hoy una de las fiestas más importantes; esta celebración solemne es columna vertebral para los católicos: “Corpus Christi”, el gran amor de Cristo manifestado con su presencia real en la Iglesia: “Cuerpo y sangre de Cristo”; muchos dicen que es mera apariencia, sólo un memorial. El fiel se pregunta: ¿Corpus Christi, realidad salvadora o simple celebración de la Iglesia?, veamos que es lo que se puede dictaminar.

Hombres y mujeres que se han encontrado con Cristo Jesús han comenzado una vida de conversión, esa vida poco a poco va adquiriendo otro perfil, el perfil de Cristo, por lo tanto, también se van introduciendo más en los dogmas y amores de la Iglesia, es decir se hacen personas asiduas y amorosas a la Iglesia. Una celebración importante en las festividades de la Iglesia es la de “Corpus Christi” a la cual también se arraigan más y la aman, ahora no por tradición sino por verdadera fe, podemos deducir que antes, sólo era una festividad para ellos, pero después de su encuentro con Cristo, ahora una gran verdad que vive, pero…¿para el resto de los católicos que significa?

>Para entender que es la celebración del Día de Corpus Christi es necesario remontarse a los años 1192-1258. Se cuenta que en Lieja, Bélgica, una religiosa cisterciense llamada Juliana de Cornillón (1192-1258) tuvo una visión, la cual interpretó como la necesidad de instituir una celebración o conmemorar la presencia de Jesús en la Eucaristía, no porque no se le tuviera con el mismo valor de hoy en cuanto a ser cuerpo y sangre de Cristo y no se diera la transubstanciación. Se sigue narrando que una noche, la luna llena brillaba como plata, pero con una mancha negra. Así pues, interpretó que la luna representaba a la Iglesia militante en la tierra, que recibe la luz del Sol: Cristo Jesús; la mancha significó para ella la carencia de una celebración litúrgica para la Eucaristía, entonces considera que era necesario dedicar el amor y solemnidad a Jesús sacramentado. Ella presentó la petición a las autoridades eclesiásticas, llegó el momento en que el Obispo de Lieja Roberto de Theorette en el año de 1246, celebró el primer Corpus.

>El Papa Urbano IV tuvo conocimiento bien del asunto de Sor Juliana de Cornillón, investigando y posteriormente instituyó la celebración del Corpus Christi para la Iglesia Católica Universal, fijándola el Jueves (recordando que en ella nuestro Señor Jesús dejó instituida la Eucaristía) después de la fiesta de la Santísima Trinidad. El mismo Papa Urbano IV le pidió a Santo Tomás de Aquino preparará un oficio litúrgico propio para esta fiesta, así como la creación de cantos e himnos para celebrar a Cristo Eucaristía. Que bellos son estos cantos, entre ellos están: la sublime secuencia “Lauda Sion” que se canta en la Misa de Corpus Christi. (En la parte inferior de este artículo se encuentra en audio mp3 la secuencia)

En la actualidad estas festividades de la Iglesia Católica se realizan en muchos países del mundo con gran fervor y amor, el detalle es preguntarse: ¿por qué no en todos los países católicos?, ¿qué acaso tienen la opción de celebrar o no?, o ¿acaso no creen que sea realidad lo de la presencia real de Cristo, como la han querido difundir otros hermanos diciendo que es un memorial?, o tal vez, algunos digan que no fue instituida está fiesta desde el inicio de la Iglesia primitiva, basta señalar que muchos ritos han ido quedando establecidos en la Iglesia de acuerdo como va Cristo perfeccionandola, así, analicemos otros puntos.

En este día se celebra la Eucaristía ¡como nunca!, ¿qué no debería de ser siempre así?; más fieles comulgan e incluso sube el número de confesiones y más fieles participan en la procesión y ya no les da pena, uniéndose al peregrinar, la salvación dada por Cristo en nuestra asamblea es una realidad que no se puede negar, el gran sacrificio de Cristo redentor, no hay manera de refiutarla, en América, Europa, Oceanía, África y Asía se celebra vivamente la fiesta de: “Corpus Christi”. Su principal finalidad es proclamar y aumentar la fe de la Iglesia Católica en Jesucristo presente en el Santísimo Sacramento y que cada fiel sea amante de recibir el cuerpo de Cristo en la celebración eucarística y visitarlo en el sagrario, no es utopía lo que la Iglesia proclama y cree, basta ver la gran cantidad de procesiones, participaciones de los fieles y el sacerdote, es la más dulce verdad porque allí se tienen un encuentro vivo con Cristo cabeza de la Iglesia a quién congrega. La Celebración se lleva a cabo el siguiente jueves al octavo domingo después del Domingo de Resurrección (es decir, 60 días después del Domingo de Resurrección).

Un protestante comentó, que si el creyera realmente que Cristo Jesús estuviera realmente en la eucaristía no habría poder humano que lo separaría de Él; triste lo que dice este hermano por que es verdad, allí está, pero más triste para el católico que sabiendo que allí está Cristo no se humilla ante Él, no lo disfruta y no le cree, no le adora, no postra todo su ser a Él, es triste que sólo quieran postrar su espíritu, pero su carne, su mundo material no, y lo lamentable es que la salvación se nos ofrece día a día y no la queremos tomar. ¡Qué fácil resulta celebrar o no está festividad cuando se cree! y que monótono puede ser cuando no se cree, países supuestamente evangelizadores de Europa, ahora no la celebran, ¡barbaros!, cómo el razonamiento les llego a la cabeza y fueron seducidos de no hacerlo, pena por ellos y oremos a la vez por cada uno de los que desistieron.

Nos podemos cuestionar, si es una simple celebración de la Iglesia o la realidad salvadora de Cristo Jesús, seguro que nos quedamos con la segunda opción: “real y salvadora”, amigos la descomposición social de nuestra sociedad ha perdido lo más grande, lo más valioso e incuantificable: “a Cristo Jesús”, lo lamentable es no haber confiado en que su cuerpo y sangre está realmente en la eucaristía y Él se muestra ante su Iglesia en el santísimo sacramento; en la procesión cada rodilla se dobla y cada lengua proclama que Jesús es el Señor dice la carta a los filipenses 2, 10-11, ¿Qué falta?, ¿creer?, el Señor habla fuerte: “Dichoso el que ha creído sin haber visto” cfr. Jn 20, 29, ¿por qué no creer en el Corpus Christi?, ¿por qué no celebrar con Cristo cada eucaristía con amor y alegría?, tal vez despreciemos el cuerpo y sangre de Cristo o ya no queremos creer en cosas y asuntos de la Iglesia, pero también la salvación está en juego y no por no celebrar o no la fiesta de: “Corpus Christi”, sino más bien por no creer en Cristo Jesús, eso sería el gran triunfo del diablo, más Cristo no abandona a su Iglesia y mientras se celebre cada misa o eucaristía en el mundo dí y día y los fieles comulguen y adoren al Señor Jesús en el santísimo y las guardias de honor se mantengan firmes el diablo juntará migajas y seguirá blasfemando en contra de Cristo y de los hombres, muchos hombres caerán como pajarillos, caerán, pero muchos se salvaran para la gloria del Padre, del Hijo y del Espíritu santo.

Por tanto deducimos, sí es una tradición de la Iglesia y las tradiciones arraigan, pero también, una realidad salvadora y presencia real de Cristo Jesús en su Iglesia a la cual alimenta y guía como buen pastor; los borrachos, adulteros, blasfemos, ladrones, lujuriosos, mentirosos, engañadores, envidiosos, apostatas, retractores, anti-testimonios etc. no pueden quitar en absoluto la acción salvadora de Cristo Jesús, no pueden evitar la justificación de Cristo Jesús, no pueden evitar el amor a Cristo jesús y ni mucho menos quitarle su presencia real en la santa eucaristía y en sacramento, por ello, celebremos con gran fervor y fe está sublime fiesta de : “Corpus Christi” como el encuentro por antonomasía con Cristo Jesús.