1a lect. del libro del Profeta Isaías 50,4-7. Domingo 24 de Marzo de 2013.
DOMINGO DE RAMOS “DE LA PASIÓN DEL SEÑOR”.
“NO APARTÉ MI ROSTRO DE LOS INSULTOS Y SÉ QUE NO QUEDARÉ AVERGONZADO”.
El Señor Yahvé me ha dado lengua dócil, que sabe decir al cansado palabras de aliento. Temprano, temprano despierta mi oído para escuchar, igual que los discípulos.
El Señor Yahvé me ha abierto el oído. Y yo no me resistí, ni me hice atrás.
Ofrecí mis espaldas a los que me golpeaban, mis mejillas a los que mesaban mi barba. Mi rostro no hurté a los insultos y salivazos.
Pues que Yahvé habría de ayudarme para que no fuese insultado, por eso puse mi cara como el pedernal, a sabiendas de que no quedaría avergonzado.
Biblia de Jerusalén 3a edición / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México