Dad Gracias siempre al Rey de la Gloria. Hora Santa
Parroquia de San Pío X
Se reza la estación del Santísimo Sacramento…
En este día queremos hacer un alto a nuestras vidas y agradecerte desde lo profundo de nuestro ser, todos los bienes materiales y espirituales que de tu mano hemos recibido, hoy deseamos con todo nuestro corazón, tocar a tu corazón, para decirte gracias Señor por todas las bendiciones que de tu mano hemos recibido hasta el día de hoy, te agradecemos la vida, la muerte, la enfermedad, la salud, las alegrías y los triunfos, los fracasos, las tristezas, por la oración que hemos presentado y por la respuesta que hemos obtenido te decimos de corazón. ¡¡¡ Gracias Dios!!!
Lectura de la Primera Carta a los Tesalonicenses 5, 12-28
Os pedimos, hermanos, que tengáis consideración con los que trabajan y os gobiernan y los amonestan en nombre del Señor, mostradles un afecto particularísimo por su trabajo. Mantened la paz. Eso os recomendamos, hermanos, a los insumisos amonestadlos, a los deprimidos animadlos, a los débiles socorredlos, con todos sed pacientes. Cuidado, que nadie devuelva mal por mal; buscad siempre el bien entre vosotros y entre todos. Estad siempre alegres, orad sin cesar, dad gracias por todo. Eso es lo que quiere Dios de vosotros como cristianos. No apaguéis el espíritu, no despreséis la profecía, examinadlo todo y retened lo bueno, evitad toda clase de mal. El Dios de la paz, os santifique completamente; os conserve íntegros en espíritu, alma y cuerpo e irreprochables para cuando venga el Señor nuestro Jesucristo. El que os llamó es fiel y lo cumplirá. Rezad también por nosotros, hermanos. Saludad a todos los hermanos con el beso santo. Por el Señor os conjuro que leáis esta carta a todos los hermanos. La gracia del Señor nuestro Jesucristo esté con vosotros.
Palabra de Dios.
Releemos en silencio y en voz alta compartimos la frase que más nos guste.
Canto
//Demos Gracias al Señor, demos gracias, demos gracias al Señor//
Por las mañanas las aves cantan las alabanzas a Cristo Salvador. (2)
Y por las tardes las flores cantan, las alabanzas a Cristo Salvador. (2)
Y por las noches los cielos cantan, las alabanzas a Cristo Salvador. (2)
Y a todas horas los hombres cantan, las alabanzas a Cristo Salvador. (2)
Demos gracias a Dios
Intimidad Divina Gabriel de Sta. Ma. Magdalena O.C.D.
Si muchas son las necesidades del hombre, más numerosos aún son los beneficios divinos, de que goza sin darse cuenta, por eso a la oración de petición ha de ir siempre unida a la acción de gracias. ¿Qué tienes que no lo hayas recibido? Y si lo has recibido, ¿a qué gloriarte cual si no lo hubieras recibido? La ingratitud, fruto con frecuencia del orgullo, implica un tácito orgullo, porque quien no da gracias, está considerando lo que posee no como don gratuito de Dios, sino como algo propio debido a su capacidad. Hay también quien da gracias recibidas o el bien practicado.
El agradecimiento acepto a Dios es el que sale del corazón humilde, convencido de que sólo Dios produce: “el querer y el obrar”. Es lo que a diario canta la Iglesia en nombre de todos los hombres para resarcir la ingratitud de muchos e impetrar la salvación de cada uno. La Iglesia declara la gratitud, “deber y salvación” dar gracias a Dios por sus inmensos beneficios es solicitar el cumplimiento de su obra misericordiosa para la salvación propia y de todo el mundo. Pero esa eficacia queda solo asegurada cuando se hace “por Cristo nuestro Señor, en unión a él u por sus meritos infinitos. Tal sucede en el Sacrificio Eucarístico que es la acción de gracias por excelencia, en el que Cristo, Sacerdote y Victima, e acción de gracias al Padre en nombre de toda la humanidad.
Releemos en silencio y oramos espontáneamente de acuerdo a lo que leímos.
Canto.
Gracias quiero darte por amarme, gracias quiero darte yo a ti Señor
Hoy soy feliz porque te conocí, pues te amo y nunca te olvidaré.
Yo quiero ser, Señor amado, como el barro en manos del alfarero
Toma mi vida, hazla de nuevo, yo quiero ser un vaso nuevo.
Te conocí y te ame, te pedí perdón y me escuchaste
Si te ofendí, perdóname Señor, pues te amo y nunca te olvidare.
Oremos a María Santísima
Madre Santísima te pedimos este día que nos ayudes a agradecer a Dios todos los bienes que de su mano hemos recibido, que podamos tener siempre un corazón agradecido, pero por sobre todo enséñanos a participar con amor, en el Sacrificio Eucarístico que es la acción de gracias por excelencia, para que siendo dóciles al Espíritu Santo sepamos apreciar todos los momentos de la vida para crecimiento espiritual. Amén.
1er Misterio. Tenemos que dar siempre gracias a Dios por vosotros hermanos, como es justo, porque va creciendo vuestra fe y va aumentando vuestro amor mutuo. Hasta el punto de que estamos orgullosos de vosotros frente a las Iglesias de Dios, por vuestra fe y paciencia en las persecuciones del justo juicio de Dios y servirán para haceros dignos del reino de Dios, por el que padecéis. 2Tes. 1, 3-5
Agradezcamos la paciencia en las persecuciones.
2do. Misterio. La palabra de Cristo habite entre vosotros en toda su riqueza, con toda destreza enseñaos mutuamente. Con corazón agradecido cantad a Dios salmos, himnos y cantos inspirados. Todo lo que hagáis, de palabra o de obra, hacedlo invocando al Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él. Col. 3, 16-17
Con un corazón agradecido enseñémonos la Palabra unos a otros.
3er. Misterio. ¿Cómo pagare al Señor todo el bien que me ha hecho? Alzare la copa de la salvación invocando el nombre del Señor y cumpliré al Señor mis votos en presencia de todo el pueblo. Te ofreceré un sacrificio de acción de gracias, invocando el nombre del Señor y cumpliré al Señor mis votos en presencia de todo el pueblo. Sal. 116, 12-14. 17.18
Agradezcamos cumpliendo en todo con el Señor.
4to. Misterio. Dad gracias al Señor, porque es bueno, porque es eterna su misericordia. Diga la casa de Israel, es eterna su misericordia. Diga la Casa de Aarón es eterna su misericordia. Digan los fieles del Señor; es eterna su misericordia. Sal. 118, 1-4
Que nuestra gratitud, se manifieste en la misericordia.
5to. Misterio. Siempre que me acuerdo de vosotros, doy gracias a mi Dios y siempre que pido cualquier cosa por todos vosotros, lo hago con gozo, por vuestra participación en el anuncio de la buena noticia, desde el primer día hasta hoy. De esto estoy seguro, que el que comenzó en vosotros una obra buena, la llevará a término hasta el día de Cristo Jesús. Fil. 1,3-6
Agradezcamos a Dios el que seamos parte de esta misión evangelizadora.
Oremos en Silencio
Por las necesidades de todos los presentes
Consagremos a todos nuestros familiares, perseguidores y enfermos al
Corazón Inmaculado de María para que ella los bendiga.
Hagamos unos momentos de Silencio
Reparemos el Corazón de Jesús.
Los momentos que nos quedan reparemos el Corazón de Jesús que sufre por los sacrilegios cometidos en las diversas Iglesias del mundo entero y por todos los que cometen comuniones y confesiones sacrílegas, oremos para que el Espíritu Santo, de luz y conversión a todos ellos y a todos nos permita realizar buenas confesiones.
Repetimos varias veces esta jaculatoria, para reparar su Corazón.
Jesús que eres azotado en nuestras Iglesias. Te adoro en todas las
Partículas esparcidas. Tómame como tu Sagrario, tu trono, tu altar; sé
Que no soy digno, pero tú quieres estar ente los que te amamos y yo te
Quiero amar también por los que no te aman, hazme digno de recibirte a
Ti, que quieres ser semejante a nosotros en esta hora de guerra. Que
Mi amor sea lámpara que arda ante Ti
Oremos todos unidos
¡Omnipotente, santísimo, amabilísimo y sumo Dios, sumo bien,
Todo bien, todo el bien, que sólo eres bueno!
Te doy toda la gloria, todo el honor, toda bendición y todo bien a ti lo refiero.
Y pues yo mísero y pecador no soy digno de nombrarte,
Te ruego suplicante para que el Señor nuestro Jesucristo,
Tu amado Hijo, en el que mucho te complaciste,
Junto con el Espíritu Santo, consolador,
Te dé gracias como a ti te place, por mí y por todos,
Él que te basta siempre en todo respecto y por el cual tanto nos ha sido dado.
S. Francisco de Asís.
Canto.
Juntos para soñar nuevas dimensiones,
Juntos para marcar ritmos de nuevo amor.
Juntos miramos la vida, juntos al amanecer
Juntos formamos la espiga del día nuevo que va a nacer.
Juntos alzamos la copa llena hasta el borde de luz
Juntos bebemos estrellas en brindis nuevo de juventud.
Juntos marchamos unidos como escuadrón del amor,
Juntos templamos en forma la paz de un mundo nuevo y mejor.
Juntos tendemos los ojos sobre el espejo de Dios
Juntos sentimos la tierra mientras clamamos Dios es Amor.
¡Unidos en la Eucaristía!