Evangelio San Juan 6,60-69. Sábado 28 de Abril de 2012.
“SEÑOR, ¿A QUIÉN IREMOS? TÚ TIENES PALABRAS DE VIDA ETERNA”.
Al escucharlo, cierto número de discípulos de Jesús dijeron: “¡Este lenguaje es muy duro! ¿Quién querrá escucharlo?”
Jesús se dio cuenta de que sus discípulos criticaban su discurso y les dijo: “¿Les desconcierta lo que he dicho?”
¿Qué será, entonces, cuando vean al Hijo del hombre subir al lugar donde estaba antes?
El espíritu es el que da vida, la carne no sirve para nada. Las palabras que les he dicho son espíritu y vida.
Pero hay entre ustedes algunos que no creen.
Porque Jesús sabía desde el principio quiénes eran los que no creían y quién lo iba a entregar.
Y agregó: “Como he dicho antes, nadie puede venir a mí si no se lo concede el Padre.
A partir de entonces muchos de sus discípulos se volvieron atrás y dejaron de seguirle.
Jesús preguntó a los Doce: “¿Quieren marcharse también ustedes?”
Pedro le contestó: “Señor, ¿a quién iríamos? Tú tienes palabras de vida eterna.
Nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo de Dios.
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México