Fiat. Oración
Madre mía que en el cielo estás,
Haz que a Jesús no ofenda jamás;
Por lo tanto de la Divina Voluntad
No permitas me separe nunca.
Reina del Divino Querer,
Tómame en tu regazo materno
Y enséñame a vivir sólo de la Divina Voluntad.
Reina soberana,
Viviendo en la Divina Voluntad,
Te pido para mí y para todos,
Tu santa Bendición,
Que ésta descienda como celestial rocío
Sobre los pecadores y los convierta,
Sobre los afligidos y los consuele,
Sobre los sacerdotes y los nutra de
Voluntad Divina,
Sobre el mundo entero y lo transforme al bien,
Sobre las almas del Purgatorio
y alivie el fuego que las aflige.
Tu bendición materna
sea signo de Eterna Salvación
Para todas las almas.
Así sea.