“VENGAN A MI TODOS LOS QUE ESTÁN FATIGADOS”.
Vengan a mí los que van cansados, llevando pesadas cargas, y yo los aliviaré.
Carguen con mi yugo y aprendan de mí, que soy paciente y humilde de corazón, y sus almas encontrarán descanso.
Pues mi yugo es suave y mi carga liviana.
Biblia Latinoamericana/ se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México