“TODO LO PUEDO UNIDO A AQUEL QUE ME DÁ FUERZAS”.
Sé pasar privaciones y vivir en la abundancia. Estoy entrenado para todo y en todo momento: a estar satisfecho o hambriento, en la abundancia o en la escasez.
Todo lo puedo en aquel que me fortalece.
Sin embargo, hicieron bien en compartir mis pruebas.
Mi Dios, a su vez, proveerá a todas sus necesidades, según su inmensa riqueza en Cristo Jesús.
Gloria a Dios, nuestro Padre, por los siglos de los siglos. Amén.
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México