SAN SERGIO DE RADONECH, del latín “guardián” (1314-1392). Abad.
Bartolomé es su nombre en la tierra.
Nace en Rostov, Rusia hacia el año 1313. Hijo de boyardos (terratenientes rusos). A los quince años su familia se muda a Moscú para escapar de los asedios que los mongoles perpetran contra su ciudad; su padre pierde su riqueza y sobreviven dedicándose a las labores del campo.
Es obediente, callado y dedicado a la oración; come sólo pan y agua y en los días marcados como de ayuno se abstiene de ingerir alimento alguno. Sin precisarse fechas, mueren sus padres, Cirilo y María; Bartolomé y su hermano mayor, Esteban, deciden vivir como ermitaños en Radonech; ahí construyen una choza y una pequeña capilla, la cual es bendecida por el metropolita Feognosto -éste es el origen de la gran Laura que después se construirá-, consagrada a la Santísima Trinidad. Pasado algún tiempo, Esteban deja a su hermano e ingresa en el monasterio de Bogoiavlensky (Aparición Divina, en ruso), de Moscú.
El joven Bartolomé queda solo en el monte y el maligno le tienta para que abandone su estilo de vida; sin embargo, el santo varón resiste con paciencia y oración. Como es natural en el monte habitaban lobos, osos y otros animales los cuales le respetan e, incluso, le “visitaban”, siendo ésta su única compañía durante cerca de dos años. Pese a lo aislado de su reclusión, su fama de santidad llega hasta la comunidad vecina; entonces, algunos religiosos y seglares se le unen solicitándole sus consejos para llevar una vida acorde al Evangelio. En ese tiempo decide adoptar el nombre de Sergio. Sus discípulos le piden que –según la costumbre-, tome la bendición y se consagre como sacerdote y su abad; sin embargo, por humildad no aceptó.
Después de un tiempo y, -se dice–, obedeciendo una voz proveniente del cielo, accede (1354), y es consagrado en Pereyaslav Zalesky como Metropolita Catedrático de Moscú y abad de monasterio de la Santísima Trinidad. Como superior san Sergio da ejemplo de vida austera y oración. Al principio la comunidad sufre grandes carencias. Tiempo después, la abadía entra en crisis; ante ello las autoridades eclesiásticas urgen al santo para que retome la dirección.
Por su ejemplar vida y sabiduría el Príncipe de Moscú san Dimitry Ivanovich -llamado Dimitry Donskoy (6 de julio)-, le nombra su consejero Las atinadas recomendaciones de san Sergio fueron base para que se logre la victoria sobre los mongoles en 1380, la cual terminó definitivamente con la dominación de ese pueblo sobre Rusia. San Sergio funda más de cuarenta monasterios y es querido y admirado por toda la nación; sin embargo, su espíritu siempre añora la soledad de la vida eremítica; por ello renuncia a su cargo y sus últimos seis meses de vida los paso en la soledad, haciendo oración, ayunos y penitencias Nicolás V (1447-1455) lo canoniza en 1449. Se le considera Patrono de Rusia y el santo más importante de dicha nación.