“DICHOSO EL HOMBRE QUE TEME AL SEÑOR”
¡Dichosos los que temen a Yahvé y recorren todos sus caminos!
Del trabajo de tus manos comerás, ¡dichoso tú, que todo te irá bien!
Tu esposa, como parra fecunda, dentro de tu casa; tus hijos, como brotes de olivo, en torno a tu mesa.
Con tales bienes será bendecido el hombre que teme a Yahvé.
¡Bendígate Yahvé desde Sión, que veas la prosperidad de Jerusalén todos los días de tu vida.
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México