Parroquia de San Pío X
Yo soy la Puerta
Jesús, pues tomó de nuevo la palabra: “En verdad les digo que Yo soy la puerta de las ovejas. Todos los que han venido eran ladrones y malhechores, y las ovejas no les hicieron caso. Yo soy la puerta: el que entre en mi estará a salvo; entrará y saldrá y encontrará alimento. Jn.10,7-9
Jesús se presenta a sí mismo como la puerta de salvación, como camino, verdad y vida, como entrada a la salvación, a la paz, a la plenitud, a la unidad, a la Gloria Divina. Jesús es el único camino que conduce al Padre.
El ladrón solo viene a robar, matar y destruir, mientras que Yo he venido para que tengan vida y la tengan en plenitud.”Jn. 10, 10
San Juan Crisóstomo: Con esta expresión, Jesús quiere designar indirectamente a los mismos fariseos, a todos los que ya han venido y a los que deberán comparecer después de Él, el anticristo y los falsos profetas. Todos estos presentan una característica común; es decir, enseñan el error, y se preocupan mucho más por sus propios intereses, que por el bien del prójimo.
El ladrón es todo aquel que provoca discordia, divisiones, levantamientos, muertes. El pueblo se ha acostumbrado a ver a gobernantes, políticos, dirigentes que abusan de su poder y que se enriquecen a costa del pueblo, que a base de engaños llegan a estar al frente de una nación, olvidándose de sus todas sus promesas de construir y trabajar por los más débiles y por los más necesitados. Son todos aquellos que crean ilusiones falsas en aquellas personas que buscan soluciones a su economía, a su trabajo, en la adivinación, en el amuleto, todos aquellos que hacen creer en nuevas doctrinas, aquellos que enseñan caminos falsos que llevan a la muerte, a la perdida de la dignidad humana.
¡Ay de ustedes, pastores de Israel: pastores que sólo se preocupan por ustedes mismos! Ez 34,2
Para salvarse hay que buscar el bien y no el mal. Amos 5,14
El pueblo siempre tiene la esperanza de que algún día cambiara esta situación, de que algún día llegara esa persona a quien verdaderamente se interese por las necesidades más apremiantes que hay en nuestro país y en nuestra sociedad, ya basta, que el pobre o el más necesitado sea siempre el que pague las consecuencias de los errores de otros, ya basta, que el enfermo de la tercera edad no cuente con un servicio médico gratuito y que no tenga ni para vivir, ya basta, que tanta gente sufra debido a la falta de trabajo, ya basta, que cada año aumente la pobreza no solo en el país, sino también en el mundo entero, ya basta, … hagamos cada uno lo que nos corresponde y al menos ayudemos nosotros en la medida de nuestras posibilidades a nuestros hermanos necesitados.
Cristo es fuente de vida, de amor, de entrega, de sabiduría, de paz, de generosidad……presente en la Eucaristía, Él fortalece tu espíritu y da fuerza para hacer el bien, búscalo con mayor frecuencia y ardor.
Oremos a nuestro Padre para que infunda en nuestros corazones el don de la caridad, y nos enseñe amar como el ama.
Oremos a nuestro Padre para que mueva nuestros sentimientos de generosidad, para que sepamos compartir lo que Él no ha dado con los que poco tienen.
Oremos a nuestro Padre por todos nuestros hermanos que no tienen trabajo para que pronto lo consigan y ayude en todas sus necesidades.
Oremos a nuestro Padre por todos los seres humanos, para todos unidos luchemos por la paz y la justicia.
Oremos a nuestro Padre por todos los presidentes, gobernantes, políticos, maestros, jueces, por todas aquellas personas en cuyas manos está el porvenir de las naciones, para que bendiga y ayude en todas sus necesidades, y haga de ellos un verdadero ejemplo a seguir.
¡Unidos en la Eucaristía!