Oración de San Pío, para rezarla después de la Comunión.
Has venido a visitarme
como Padre y como amigo
Jesús, no me dejes solo…
¡quédate Señor conmigo!
Por el mundo envuelto en sombras
soy errante peregrino,
dame tu luz y tu gracia…
¡quédate Señor conmigo!
En este precioso instante
abrazado estoy contigo
que esta unión nunca me falte…
¡quédate Señor conmigo!
Acompáñame en la vida
tu presencia necesito,
sin ti desfallezco y caigo…
¡quédate Señor conmigo!
Declinando está la tarde
voy corriendo como río al
hondo mar de la muerte…
¡quédate Señor conmigo!
En la pena y en el gozo
sé mi aliento mientras vivo.
Hasta que muera en tus brazos
¡quédate Señor conmigo!
San Pío X, ruega por nosotros
Unidos en la Eucaristía