Parroquia de San Pío X
Billete Celador -Un mensaje para ti Guardia de Honor- Culto
al Sagrado Corazón de Jesús
Vengan a mí los que van cansados, llevando pesadas cargas, y yo los aliviaré.
(Mt.11,28)
El corazón humano está siempre inquieto, por la enfermedad, la necesidad económica, las fatigas del trabajo diario, la familia, etc. la invitación que Jesús nos hace es para todos , así como te encuentres, afligido, agobiado, decepcionado, él te invita a unirte a él a seguirlo. Él no te promete quitarnos la carga sino, darnos los medios para sobrellevar la carga: de Paciencia, de amor, de entrega, etc.
Jesús es la fuente: de él brota la vida divina del hombre. Sólo hace falta acercarse a él, permanecer en él, para tener la vida. Y esa vida es el inicio de santidad del hombre, la santidad de Dios, que el hombre puede alcanzar con la ayuda de la gracia.
Su Corazón es símbolo de su inmensa caridad hacia el género humano.
La meditación del amor de Dios, que se nos ha revelado en el Corazón de su hijo, exige del hombre una respuesta coherente; llamados a participar de él. Cristo dice: “Si ustedes me aman, guardarán mis mandamientos”(Jn.14, 15). Así al mismo tiempo que nos dirige una gran llamada, nos pone una condición: si quieres amarme, cumple mis mandamientos; sigue el camino que Dios te ha señalado y que yo te he indicado con el ejemplo de mi vida.
Juan Pablo II
La voluntad de Dios es que cumplamos sus mandamientos, es decir, la ley que dio en el monte Sinaí a Israel por medio de Moisés, se la dio a todos los hombres.
Los mandamientos fueron dados por el bien del hombre y son el verdadero camino que lo conducirán a Dios.
“El que guarda mis mandamientos después de recibirlos, ése es el que me ama. El que me ama a mí será amado por mi Padre, y yo también lo amaré y me manifestaré a él”(Jn. 14,21).
El amar a Dios con lleva también a amar sus leyes, sus ordenanzas, a desear cumplir en nuestra vida diaria sus mandamientos, a forjar una conciencia de acuerdo a su voluntad, amarlo es un compromiso para el cristiano. Y un mundo sin Dios, es un mundo lleno de violencia, egoísmo, rencor, odio, etc. y que al final nos lleva a la destrucción, esto no es el camino trazado por Dios, esto nos lleva a la esclavitud, al pecado. Y “El salario del pecado es la muerte”(Rom.6,23).
“El pecado es una ofensa a Dios, una desobediencia , el pecado se opone al amor de Dios hacia nosotros y lo aleja de nuestro corazón, el pecado nos lleva a despreciar a Dios”.
San Agustín dice: El pecado es un gran mal, en sus múltiples dimensiones: comenzando por el original, pasando por todos los pecados personales de cada hombre, hasta los pecados sociales, los pecados que gravan sobre la historia del humanidad entera.
Cuanto más profunda sea nuestra unión con Dios, la vida sacramental y la oración, tanto más claro el sentido del pecado.
Busca con mayor frecuencia a la fuente de agua viva y pidámosle como la Samaritana, “Dame de esa agua”, pues da la vida eterna.
Amalo con mucho fervor, hoy no le pidas nada, hoy agradece todas sus bondades.
Intenciones:
Roguemos a nuestro Padre, para que nos de la gracia, de amarlo con mayor conciencia, y así descubra mi compromiso como cristiano de ser verdadero ejemplo para los demás principalmente en mi familia.
Roguemos nuestro Padre para que nos de la valentía y el amor necesario para cumplir sus mandamientos, y así mostrarle nuestro amor.
Roguemos por la salud de: P. Juan Manuel Fernández, Ramón González, Vicky Aranda, Coco Núñez Merino, Arturo Hernández Enríquez, Isabel Flores, Francisco Covarrubias Vázquez, bebe Diego problema del corazón.
¡Unidos en la Eucaristía!