Listos los subsidios y capacitación, formación de los EPPSO´s caritas. Pastoral social.
Estos dos tomos son los subsidios que la arquidiócesis de León ofrece para la formación y capacitación de sus EPPSO´s caritas (equipos parroquiales de la pastoral social), con una capacitación de 40 horas para los postulantes con dos clases por semana de 2 horas; en estos dos tomos se abarcan los aspectos necesarios para una verdadera comunión con la labor que la pastoral social implica.
Primeramente en el tomo uno se definen perfectamente los elementos básicos para darse cuenta de la realidad que la pastoral social tiene en la pastoral general; las palabras que dirige el Excmo. Arzobispo don José Guadalupe Martín Rábago tomadas del objetivo específico n. 4: “formar a los agentes laicos en las escuelas parroquiales, para que completen su formación en la doctrina social de la Iglesia” son de interés general, están conscientes del papel que va a desempeñar el equipo que coordinados ya por el sacerdote son los que al final trabajarán en el área, esto significa una comunicación entre los agentes que influyen en la pastoral social, con nueve módulos el primer subsidio incluye en el módulo IX una estrecha relación entre los equipos y el apostolado de caridad, su papel, su aceptación fraterna, su acción integral etc.
En el tomo dos del subsidio se tocan los puntos básicos de la doctrina social de la Iglesia, al igual con nueve módulos este subsidio, brilla la rica doctrina social de la Iglesia, los derechos humanos, la misión de la Iglesia en la sociedad, los designios de amor de Dios para la humanidad, su promoción y respeto, así como el principio del bien común, de subsidiaridad y de los valores fundamentales en la vida social; estamos ante un magnifico proyecto que los capacitadores asignados por CODIPAS (comisión diocesana de la pastoral social) podrán capacitar ampliamente en aspectos que no son tan ajenos al hacer y quehacer de la Iglesia.
Tal vez con está capacitación se finquen las estructuras necesarias para borrar la terrible división entre fe y vida, uniéndose en uno sólo para que entonces se hable de una nueva sociedad, una nueva humanidad y que es posible, claro siempre y cuando el cristiano este de acuerdo en trabajar y dejarse formar.
A groso modo es la semblanza de está capacitación en la cual se ha puesto una gran esperanza en que este cierre de la campaña de la pastoral social marque verdaderamente una etapa donde la Iglesia, encause una relación estrecha entre el creyente y jerarquía.