Con él tenemos la certeza de que, si le pedimos algo conforme a su voluntad, nos escuchará.
Y si nos escucha en todo lo que le pedimos, sabemos que ya tenemos lo que le hemos pedido.
Si alguno ve a su hermano en el pecado -un pecado que no ha traído la muerte-, ore por él y Dios le dará vida. (Hablo de esos pecadores cuyo pecado no es para la muerte).
Porque también hay un pecado que lleva a la muerte, y no pido oraciones en este caso.
Toda maldad es pecado, pero no es necesariamente pecado que lleva a la muerte.
Sabemos que el que ha nacido de Dios no peca, pues lo protege lo que en él ha nacido de Dios, y el Maligno no puede tocarlo.
Sabemos que somos de Dios, mientras el mundo entero está bajo el poder del Maligno.
Sabemos también que el Hijo de Dios ha venido y nos ha dado inteligencia para que conozcamos al que es Verdadero. Nosotros estamos en el Verdadero, en su Hijo Jesucristo; ahí tienen el Dios verdadero y la Vida eterna.
Hijitos, guárdense de los ídolos.
Porque también hay un pecado que lleva a la muerte, y no pido oraciones en este caso.
Toda maldad es pecado, pero no es necesariamente pecado que lleva a la muerte.
Sabemos que el que ha nacido de Dios no peca, pues lo protege lo que en él ha nacido de Dios, y el Maligno no puede tocarlo.
Sabemos que somos de Dios, mientras el mundo entero está bajo el poder del Maligno.
Sabemos también que el Hijo de Dios ha venido y nos ha dado inteligencia para que conozcamos al que es Verdadero. Nosotros estamos en el Verdadero, en su Hijo Jesucristo; ahí tienen el Dios verdadero y la Vida eterna.
Hijitos, guárdense de los ídolos.
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México