VEN, SEÑOR, A SALVARNOS.
Escucha, pastor de Israel, que guías a José como un rebaño, tú que te sientas en los querubines
¡Despierta tu valentía, ven y sálvanos!
¡Oh Dios de los ejércitos, restablécenos, haz brillar tu faz y sálvanos!
¡Oh Dios Sabaot, es hora de que regreses; mira de lo alto del cielo y contempla, visita esa viña”
y protégela, ya que tu derecha la plantó!
Que tu mano apoye al hombre que hace tus obras, al hijo de hombre que has hecho fuerte para ti.
Ya no nos apartaremos más de ti, nos harás revivir y tu nombre invocaremos.
Biblia Latinoamericana/ se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México