CAPITULO VII
UN CIELO NUEVO Y UNA TIERRA NUEVA
33.- El sueño de Dios para todos los hombres de buena voluntad.
A LECTURA DEL TEXTO DE LA VIDA
Un hecho de la vida de hoy
Una profesora mandó hacer a sus alumnos un dibujo del cielo. Una niña de tercer grado dibujó una piscina, bosque, muchos amigos y Dios sentado al lado, observando tranquilo y contento por la alegría de sus criaturas. Debajo de él escribió: no sólo para las vacaciones, sino para siempre. No sólo para los niños ricos, sino para todos
Un niño de un suburbio dibujó una procesión: todos cantaban una tonada alegre que transformaba la ciudad en un ambiente alegre y Dios asistiendo y recibiendo explicaciones de una mujer pobre pero muy bien vestida.
Un hecho de la vida del tiempo de Jesús
Jesús compara el cielo con un banquete (22,2). Ya está todo preparado (Mt 22,4). El mismo va a servir la mesa (Lc 12,37), dice que el futuro de Dios será cien veces mejor que la vida presente (Mt 19,29). Será como un tesoro que se encuentra (Mt 13,44), como el agua fresca en el camino después de una marcha fatigosa por el desierto (Jn 4,14;7,37). Será como la casa del Padre donde ya tendremos un lugar preparado (Jn 14,2-3). Será una vida agradable y para siempre. ¡Será la vida eterna! (Jn 10,10).
Profundizar en el hecho de vida y ver si existe en nosotros Casi nadie cree en los sueños, pero todo el mundo desea soñar en un futuro mejor. Los sueños nacen de la esperanza. Veamos:
– ¿Qué hay de común entre Jesús y los dos niños que hicieron sus dibujos? ¿por qué?
– Los niños soñaron en el futuro pensando en las cosas bonitas de la vida presente. Cuando tú sueñas, ¿qué ideas tienes?
– Regresando un sacerdote de visitar a un moribundo, el taxista le dijo: Me gusta tanto la vida, que si en el otro lado hay descanso, prefiero vivir cansado. El futuro de Dios no atrae. ¿Por qué será?
– ¿Qué es lo que está impidiendo la realización del sueño que tú alimentas para el futuro? Responde con hechos concretos.
B. LECTURA DEL TEXTO DE LA BIBLIA
Animador:
La Biblia quiere mantener en nosotros la esperanza, un futuro abierto. Apoyada en la fuerza y en la debilidad del hombre y en la fidelidad de Dios, nos hace unas descripciones muy bellas del futuro de las cuales vamos a escuchar una:
Lectura del libro del Apocalipsis: 21, 1-7 y 22,3-5.
Descubramos el mensaje que la Palabra de Dios tiene para hoy Antes de hacerlo, necesitamos unos momentos de silencio y haber entendido bien la lectura para sacar el verdadero fruto.
– ¿Cuál es la comparación o imaginación que más te gustó, ¿por qué?
– Todo lo que más deseamos y soñamos en la vida encuentra una respuesta aquí. ¿Cuál?
– Si no la encuentra aquí ¿la encontrarías en otro lugar de la Biblia que hable del futuro? ¿Cuál?
– Lee una vez más el texto y ve enumérando una por una las cosas que Dios tiene reservadas para el futuro y que aparecen aquí. Compáralas con la vida que vivimos y enumera las diferencias. ¿Qué debe cambiar en nuestro pueblo, ciudad, país, en nuestra sociedad para que entren en el futuro de Dios?
– La muerte, el luto, el llanto, el dolor, la maldición, la división y el odio, entraron en el mundo por el pecado. En el nuevo cielo y en la nueva tierra no habrá nada de eso. ¿Conoces alguna comunidad o algún lugar donde ya se pueda ver el COMIENZO de este futuro? Cuenta…
– Los cristianos deberíamos ser una muestra y un ejemplo de este futuro. Deberíamos mostrar con nuestra vida que este futuro es posible. ¿En tu comunidad están planteando o comenzando este futuro? ¿Qué pruebas o señales dan?
– Sabiendo que tú debes colaborar en la construcción del futuro de Dios, ¿cuál es la conclusión que vamos a sacar para nuestra vida presente?
– ¿Qué vamos a realizar en concreto para poner en práctica todo esto?
34.- El primer hijo del futuro
A LECTURA DEL TEXTO DE LA VIDA
Un hecho de la vida de hoy
¡Esperaba tanto encontrar algún empleo, pero ya llevo cuatro semanas y no encuentro nada…! Así decía la señora Francisca en el bus de regreso para su pueblo. Ella se desahogaba con la mujer que iba a su lado: Fuimos del pueblo a la capital creyendo encontrar un paraíso. Perdimos lo poco que teníamos. Cuatro semanas de puerta en puerta buscando empleo. Esta cruz es demasiado pesada. Perdí la esperanza. No creo más en la buena voluntad de los hombres. Todo el mundo es egoísta. Nadie quiere ayudar a nadie. Cada uno busca su interés .
Un hecho de la vida del tiempo de Jesús
Nosotros esperábamos que sería él el que iba a librar a Israel; pero, con todas estas cosas, llevamos ya tres días desde que esto pasó (Lc 24,21). Así hablaba Cleofás al Señor desconocido, en el camino, ya de regreso para casa. Durante tres años caminaron detrás de Jesús de Nazaret. Esperaban encontrar en El todo lo que la vida podía ofrecer de felicidad. Pero ¡nada! Todo quedó peor que antes. Los sacerdotes junto con los romanos lo llevaron a la muerte (Lc 24,20). Ahora ya no tiene remedio. Nada sirve el tener buena voluntad, pues la voluntad de los otros es más fuerte. Cleofás y su amigo volvieron a la casa desanimados: Nosotros esperábamos…Los apóstoles estaban en la misma situación. Se encerraron en una casa por miedo a todos (Jn 20,19). La cruz del Viernes Santo mató la esperanza. La vida perdió el sentido. No pensaban en la posibilidad del domingo de Pascua.
Reflexión sobre el hecho de vida
Animador:
Esperar… todo el mundo espera algo, tanto la señora Francisca como Cleofás, como nosotros. Pero, a pesar del esfuerzo, la esperanza fracasa. Dejaron de creer en la buena voluntad de los demás. Esto pasa a menudo. Veámoslo:
– Cuenta un hecho de tu vida en que esperabas mucho conseguir algo, te esforzaste demasiado para lograrlo y después no conseguiste nada.
– ¿Qué faltó en la vida de la señora Francisca y en la de Cleofás? ¿Qué falta en la tuya?
– ¿Qué prefiere más nuestro pueblo, la cruz del Viernes Santo o la Resurrección de la Pascua?
– En el Viernes Santo de tu vida de cada día, ¿Has percibido alguna vez que esa cruz tiene una Pascua que sigue después? Cuenta…
B. LECTURA DEL TEXTO DE LA BIBLIA
Escuchemos lo que la Biblia enseñaba al pueblo de aquel tiempo sobre este problema
Lectura del Evangelio de Jesucristo según San Lucas 24, 13-35. Descubramos por la reflexión el mensaje de la Palabra de Dios aplicable para nosotros hoy
– El pueblo siente gozo por este trozo de la Biblia, ¿por qué?
– El peso de la cruz no viene tanto del peso de la madera. Viene del peso del poder de los romanos y del pueblo que mataron a Jesús y mataron también la esperanza y el valor de aquellos dos hombres. ¿De dónde procede el peso de la cruz que embarga la vida de doña Francisca y que tal vez, consume tu vida? Pensar bien esto.
– Los dos estaban desanimados, derribados por la cruz. Jesús se hizo sentir por su presencia y ellos se reanimaron, perdieron el miedo y con gusto hicieron la caminata de 18 kms., de regreso a Jerusalén sólo para comunicar a sus hermanos la alegría y la esperanza que sentían ahora. ¿Sucede en tu vida algo semejante? Cuenta…
– Jesús resucitó de madrugada; pero para aquellos dos hombres la fuerza de la resurrección les llegó la noche de aquel día.
– Doña Francisca no encontró esa fuerza. Los discípulos de Emaús sí, ¿por qué será que unos la encuentran y otros no?
– Jesús se hizo presente de tres maneras:
a) Como compañero
b) A través de la Biblia
c) En la Eucaristía, al partir el pan.
¿Cuál de las tres maneras te dice más?
– Sabiendo que Jesús estaba vivo los discípulos perdieron el miedo y se enfrentaron a todo. Nadie podía derrotarlos pues la fuerza era Cristo Resucitado. ¿Qué conclusión vamos a sacar de todo esto para la vida? ¿Qué vamos a hacer en concreto para llevar a la práctica lo que hemos reflexionado?
35.- El grano de mostaza se convierte en árbol
A LECTURA DEL TEXTO DE LA VIDA
Un hecho de la vida de hoy
Cierta vez, durante una misa se leyó un hecho de una comunidad cristiana de nuestros días: Antonio y Teresa eran una pareja de ancianos, casados hacía 50 años. Llegaron a la casa donde estaban reunidos estos cristianos y Alfredo, uno de ellos, los invitó a entrar. Entraron y fueron presentados a los otros. Fue la primera vez que alguien se interesó por la vida y el trabajo de Antonio y de Teresa. Una señora les preguntó: Díganos una cosa: ¿son felices en su vida de casados?La respuesta de la pareja fue una carcajada alegre y un abrazo fuerte. Como si quisieran decir: ¡Mira, que pregunta! Entonces Alfredo habló a los hermanos: Aquí están las cosas escondidas más grandes que Dios ha realizado entre nosotros durante casi 50 años y que El acaba de revelarnos. Aquí termina la lectura del hecho de esta comunidad cristiana. Y todos respondieron:¡Te alabamos, Señor!
Un hecho de la vida del tiempo de la Biblia
Nadie reparaba en la ofrenda de la pobre viuda, pero Jesús hizo saber: Ella ha dado más que todos los otros(Lc 21,3). Ninguno pensaba que un pagano pudiera tener fe, pero Jesús reveló que el centurión romano tenía más fe que los judíos (Mt 8,10). Los poderosos despreciaban al pueblo sencillo y decían: Esa gente que no conoce la Ley, son unos malditos(Jn 7, 49). Mas fue a ellos a quienes Jesús transmitió su mensaje: Yo te bendigo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has ocultado estas cosas a sabios y prudentes, y se las has revelado a los pequeños (Mt 11,25). Ninguno creía que una prostituta pudiese tener amor, pero Jesús hizo saber que ella amaba más que Simón, el fariseo observante de la ley. (Lc 7,40-47). Y muchas más cosas.
Reflexión sobre el hecho de vida
Animador:
Dios se sirve de las cosas pequeñas. Veamos:
– Antonio y Teresa son como esas florecillas que crecen y que no las vemos hasta que nos detenemos. ¿Conoces algún caso semejante al de esta pareja? Cuenta…
– ¿Cómo es posible que una pobre viuda contribuya más a la Iglesia que un rico que da lo que le sobra?
– El futuro de Dios está naciendo. Ahora parece una planta pequeña, pero es un roble. ¿Conoces algo semejante en la vida?
– Jesús dirigía la vista a las cosas. ¿Has procurado tú alzar bien la vista para descubrir las cosas de Dios en la vida?
B. LECTURA DEL TEXTO DE LA BIBLIA
Animador:
Ninguno daba crédito a aquella pobre viuda, ninguno reparaba en Antonio y Teresa. Pero Jesús sí. El cree en la fuerza de los débiles y en la sabiduría de los ignorantes. Oigamos cómo San Pablo nos explica esto: Lectura de 1 Cor 1,18-31. Descubrir el mensaje que la Biblia tiene para nosotros hoy
– ¿Cuál fue la frase que más te gustó?, ¿Por qué?
– ¿De que frase pensaste: ¿Yo no esperaba eso, esperaba lo contrario. ¿Por qué?
– ¿Tienes fe porque ves milagros, como los judíos, o porque otros te han dado pruebas científicas, como los griegos? o ¿porque crees en la debilidad de la cruz?
– Pablo pasó la mirada sobre la comunidad de Corinto. Era gente sin pretensiones. Por eso Pablo tenía esperanza. Pasa la mirada sobre tu comunidad ¿tiene la misma fragilidad? Esa fragilidad ¿es para ti motivo de desánimo o de esperanza?
– Pensando bien: ¿Hacia dónde quiere llegar Pablo? El dice que la sabiduría humana no vale nada, entonces, ¿no vale el estudiar, no vale la superación intelectual? Si el propio Pablo hizo un curso superior en Jerusalén (Hechos 22,3) ¿cómo entender esto?
– Hay gente que piensa así: Si no llamamos a fulano de tal, persona de mucha lectura y de mucha influencia, la cosa no seguirá adelante. Esa gente deja de confiar en sí misma para confiar sólo en otras personas. ¿Qué diría Pablo a este respecto?
– Después de oír las palabras de Pablo, ¿cómo juzga y ve la vida de Antonio y la vida de otros muchos Antonio y Teresa que viven por ahí?
– ¿Ayudan las palabras de Pablo a entender cómo los diez céntimos que echó la viuda valen más que los millones de los ricos? ¿De qué manera?, ¿por qué?
– ¿Existe hoy el mismo desacuerdo entre la sabiduría de los hombres y la Sabiduría de Dios? ¿En qué forma?
– ¿Qué vamos a hacer en concreto para poner en práctica la Palabra de Dios que hemos oído y reflexionado?
36.- ¡Animo, yo he vencido al mundo!
A LECTURA DEL TEXTO DE LA VIDA
Un hecho de la vida de hoy
Si tu comparas la situación de hace 50 años con la de hoy, tendrás que confesar que muchas cosas han cambiado y son mejores que antes: Luz eléctrica, carreteras y calles asfaltadas, radio, televisión, teléfono, médicos especializados… etc.. Muchos males han sido vencidos: ignorancia, distancias… En esta victoria del hombre sobre los males que nos amenazan hay un lado obscuro: el desempleo no acaba, las guerras matan a mucha gente cada día, la injusticia es inmensa, la miseria, la violencia… etc. Algo debe andar mal. En nuestra lucha contra el mal nos parecemos al pobre que lucha contra el frío: la cobija es demasiado pequeña para cubrir todo el cuerpo: si se coloca de un lado el otro queda al descubierto y con frío. La vida es mejor por un lado pero por otro no hay solución o es peor. ¿Adónde irá a parar todo esto?
Un hecho del tiempo de la Biblia
El rey Jeroboán, que gobernaba el estado de Israel en el siglo VII antes de Cristo, logró un progreso económico muy grande. El dinero entraba y la riqueza aumentaba. Pero había un lado obscuro en esa medalla brillante del Rey. El que habla de esto es el profeta Amós: Venden al justo por dinero y al pobre por un par de sandalias; los que pisan la cabeza de los débiles, y el camino de los humildes tuercen (2,6-7). Amontonan violencia y despojo en sus palacios (3,10). Pisotean al pobre y quieren suprimir a los humildes de la tierra (8,4). ¡Oh opresores del justo, que aceptan soborno y atropellan a los pobres en la Puerta! (5,12).
Reflexiona sobre el hecho de vida
Animador:
¿Hasta dónde vamos a llegar en nuestra lucha contra el mal? ¿Prevalecerá el mal sobre el bien? Veamos esto más detenidamente:
– Compara la situación que hoy vivimos con la que tú viviste cuando pequeño: ¿Qué ha mejorado?
– ¿Cómo y quién ha derrotado los males que tu conoces?
– ¿Colaboras quitando esos males en donde tú trabajas?
– ¿Cuáles son los males que han aumentado hoy y que nos hacen caer más? ¿Quién y por qué ha hecho crecer esos males? ¿Vamos hacia adelante o retrocedemos? Responde con hechos.
– Humanamente hablando, ¿quién va a ganar la lucha entre el bien y el mal? ¿Por qué? Di hechos concretos.
B. LECTURA DEL TEXTO DE LA BIBLIA
Escuchemos lo que la Biblia enseña al pueblo de aquel tiempo sobre este problema.
Animador:
Jesús previno a sus discípulos contra el desánimo, preparándolos para la lucha. El mismo fue derribado, pero no vencido. Por eso El dijo: ¡Animo, yo he vencido al mundo! Como si dijera: Si yo vencí, también ustedes vencerán. Vamos a ver ahora como el triunfo de Jesús llenó la vida de San Pablo de valor y esperanza:
Lectura de la carta de San Pablo a los Romanos 8,31-38.
Descubramos el mensaje que la Biblia tiene para nosotros hoy
– Procura decir con tus propias palabras el pensamiento de Santo Pablo.
– ¿Qué es lo que más falta en los cristianos de hoy de lo que habla San Pablo?, ¿por qué?
– ¿Tenía Amós el valor de que habla San Pablo? ¿Conoces algún Amós hoy, ¿quién?, ¿Po r qué?
– ¿Existen también hoy las posibles amenazas de las que habla San Pablo en los vrs. 35 a 38?¿Cuáles son? ¿Tenemos el mismo valor que San Pablo?
– La cobija es demasiado pequeña y deja al pobre con frío y tensión. De acuerdo con el valor del que habla San Pablo ¿cómo deberíamos obrar los cristianos de hoy para confeccionar una nueva cobija al alcance de todos?
– ¿Has experimentado ya alguna vez ese valor que nace de la fe en Cristo y que hace luchar al hombre por el bien de los demás? Cuenta…
– ¿Qué vamos a hacer en concreto para poner en práctica la Palabra que oímos y meditamos?