Volvió Yahvé a hablar a Ajaz diciendo:
“Pide para ti una señal de Yahvé tu Dios, en lo profundo del Seol o en lo más alto.”
Dijo Ajaz: “No la pediré, no tentaré a Yahvé.”
Dijo Isaías: “Oíd, pues, casa de David: ¿Os parece poco cansar a los hombres, que cansáis también a mi Dios?
Pues bien, el Señor mismo va a daros una señal: He aquí que una doncella está en cinta y va a dar a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel.