“ABANDONANDO LOS ÍDOLOS, USTEDES SE CONVIRTIERON A DIOS, Y VIVEN EN LA ESPERANZA DE QUE VENGA DESDE EL CIELO JESUCRISTO, SU HIJO”.
Hermanos: Bien saben cómo hemos actuado entre ustedes para su bien. Ustedes, por su parte, se hicieron imitadores nuestros y del Señor, pues en medio de muchas tribulaciones y con la alegría que da el Espíritu Santo, han aceptado la palabra de Dios en tal forma, que han llegado a ser ejemplo para todos los creyentes de Macedonia y Acaya, porque de ustedes partió y se ha difundido la palabra del Señor; y su fe en Dios ha llegado a ser conocida, no sólo en Macedonia y Acaya, sino en todas partes; de tal manera, que nosotros ya no teníamos necesidad de decir nada.
Porque ellos mismos cuentan de qué manera tan favorable nos acogieron ustedes y cómo, abandonando los ídolos, se convirtieron al Dios vivo y verdadero para servirlo, esperando que venga desde el cielo su Hijo, Jesús, a quien él resucitó de entre los muertos, y es quien nos libra del castigo venidero.
PALABRA DE DIOS.- TE ALABAMOS, SEÑOR.
Se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México.