Novena a nuestra Señora del Rayo
Abogada de los sin trabajo
Noveno Día
Se venera en el templo del Inmaculado Corazón de María
León, Guanajuato
Acto de Contrición
Señor mío Jesucristo, Redentor mío amabilísimo y mi Salvador; yo te adoro, te amo, te doy las más rendidas gracias por los innumerables beneficios que has hecho y haces y arrepentido de haber puesto mi amor en las criaturas abandonándote a Ti por ellas, protesto y te doy palabra de no volver a cometer semejante ingratitud. Me pesa, Señor, una y mil veces haberte atendido; quisiera morir de dolor ya que no puedo hacer otra cosa, te ofrezco las adoraciones, acciones de gracias y afectos amorosos de tu madre María Santísima de tus santos del Cielo y justos de la tierra. ¡OH cuánto dolor me causa el no sentir en mi corazón aquel amor ardiente con que deseo amarte y con qué merecerte tu bondad el ser amando! Haz conmigo, dulcísimo Jesús, la misericordia de darme un verdadero dolor de mis culpas, un propósito firme de la enmienda y una confianza segura de que tu piedad me ha de perdonar y me ha de llevar a darte las gracias por toda l eternidad. Amén.
Noveno Día
¡Oh agraciada Princesa de los cielos. Hija amabilísima del Eterno Padre; no halla mi afectuosa devoción expresiones bastante significativas para declararte la humilde confianza con que dirijo a Ti mis ruegos a la presencia de esta imagen tuya. El recuerdo de esta imagen tuya. El respeto de los infinitos males que han afligido a nuestra débil y quebradiza naturaleza, me hace formar la más sublime idea de tu poderosa protección. Mientras otros desgraciados pueblos han sufrido en otras veces recios golpes de la Justicia Divina, irritada por la culpa; nosotros protegidos singularmente por tu amor, y escudados con tu imagen Soberana, hemos sido tratados como hijos para quienes fueron ¡Tiernas miradas de Misericordia! Lo que para otros era terribles señales de cólera y de indignación. Ruego, pues, ahora por nosotros, alcánzanos lo que te pedimos n esta novena para que siendo felices en este mundo, con la felicidad que trae consigo la virtud, lo seamos también en la Patria verdadera.