El instrumento de que se valió Jesucristo Nuestro Divino Salvador para manifestar al mundo los tesoros inagotables de misericordia infinita que encierra su deifico Corazón, símbolo amoroso que despertando en el alma cristiana afectos de amor y expiación, la santifican y llevan al más alto grado de perfección, fue Santa Margarita María Alacoque, de la Orden de la Visitación.
Vivía esta santa Religiosa en Paray-Le-Monial, y muchas veces fue favorecida del Señor con apariciones y revelaciones: una de ellas, acaso la más importante para el culto del Sagrado Corazón de Jesús, la refiere ella misma, con las siguientes palabras:
“Estando delante del Santísimo Sacramento, un día de su Octava, recibí de Dios excesivas gracias de su amor, y sintiéndome movida del deseo de corresponder en algo y de volver amor con amor, me dijo así: “No puedes hacerme servicio más grande, que el que tantas veces te he pedido” y descubriendo su Divino Corazón, exclamó: “He aquí el Corazón que tanto ha amado a los hombres, que nada ha omitido hasta extenuarse y consumirse para darles testimonio de su amor, y en vez de reconocimiento no recibo de la mayor parte de ellos más que ingratitud, ya por sus irreverencias y sus sacrilegios, ya por la frialdad y desprecio que me tratan en este Sacramento de amor. Pero lo que más me aflige, es ver que así también me traten corazones que me están consagrados. Por esto te pido que el Primer Viernes después de la octava del Santísimo Sacramento, se célebre una fiesta particular para honrar mi Corazón, comulgando aquel día y reparando el honor ultrajado por medio de una satisfacción pública, a fin de espiar las injurias recibidas durante el tiempo que ha estado expuesto en los altares. Te prometo, también, que mi Corazón se dilatará para derramar con abundancia las gracias de su Divino Amor sobre los que le tributen este homenaje, y a los que procuren le sea tributado.”
Mas como alegase la humildad Religiosa que no sabía cómo poder cumplir cuanto de ella se deseaba, remitióla el Señor al B.P. Claudio de la Colombiere, de la Compañía de Jesús, por medio del cual se extendió maravillosamente la Devoción al Sagrado Corazón de Jesús, acrecentándose mucho mas al hacerse públicas las consoladoras promesas hechas por el mismo deifico Corazón a sus fieles devotos, cuando dijo: “Les daré gracias abundantes para cumplir con los deberes de su estado.- introduciré la paz en el seno de sus familias.- les consolaré en todas sus penas.- seré su seguro asilo en toda su vida y en la hora de la muerte.- derramaré copiosas bendiciones en todas sus empresas.- los pecadores hallarán en mi Corazón el manantial y el océano infinito de la misericordia.- enfervorizare a las almas tibias.- las almas fervorosas se elevarán presto a la mas encumbrada perfección.- bendiceré las casa en que la imagen de mi Corazón sea honrada .- daré a los sacerdotes el talento de ablandar los corazones más endurecidos.- grabaré indeleblemente en mi Corazón los nombres de los que propaguen esta Devoción.- prometo en el exceso de la misericordia de mi Corazón, que su amor todopoderoso concederá a todos los que comulgaren nueve primeros Viernes de mes seguidos, la gracia final de la penitencia; estos tales no morirán en desgracia mía ni sin recibir los Santos Sacramentos, pues mi Divino Corazón se tornará en la última hora su seguro asilo.”
(Autobiografía de Santa Margarita María de Alacoque)
Me parece poco los años que le echan a estos anarquistas. Como buena zaragozana y ferviente creyente de nustra señora del Pliar insisto son pocos años los que le echan. QUE EL PILAR NO SE TOCA.
cofradía del sagrado corazón de Jesús cada primer viernes de cada mes se hase una
misa y lo recibe una familia en su hogar
Me parece poco los años que le echan a estos anarquistas. Como buena zaragozana y ferviente creyente de nustra señora del Pliar insisto son pocos años los que le echan. QUE EL PILAR NO SE TOCA.