Misa de Santa María en Sábado
“EN MEDIO DEL MAR ROJO, APARECIÓ UN CAMINO PLANO Y ELLOS BRINCARON COMO CORDEROS”.
Cuando todo estaba tranquilo en medio del silencio, y había transcurrido la mitad de la noche,
tu Palabra omnipotente se lanzó desde lo alto de los cielos, donde está junto a tu trono real, y se precipitó como un guerrero furioso sobre el país condenado al exterminio. Llevaba como espada acerada tu irrevocable decisión;”
tocaba el cielo y pisaba la tierra; cuando golpeaba esparcía la muerte por todas partes.
A una orden tuya, toda la creación, con sus propiedades naturales, se renovó desde arriba para proteger a tus hijos.
Se vio a una nube que cubría el campamento con su sombra y que aparecía la tierra seca en medio del agua; se abrió en el Mar Rojo un paso seguro, una verde llanura reemplazó a las olas impetuosas,
y todo el pueblo pasó por allí. Protegido por tu mano, fueron testigos de esos prodigios asombrosos.
Saltaban como caballos en la pradera, o brincaban como corderos, alabándote porque tú, Señor, los habías librado.
PALABRA DE DIOS.- TE ALABAMOS, SEÑOR.
Te aclamamos, santa madre de Dios, porque has dado a luz al Rey que gobierna cielo y tierra por los siglos de los siglos.
Señor, Dios, concédenos a nosotros, tus siervos, gozar siempre de completa salud de alma y cuerpo, y, por la intercesión de la gloriosa siempre Virgen María, líbranos de las tristezas de esta vida y concédenos disfrutar de las alegrías eternas. Por nuestro Señor Jesucristo, , tu Hijo, que reina contigo en el cielo, en unidad con el Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos, de los siglos. Amén
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México