San Mateo. Apóstol y evangelista.
Es el apóstol, autor del primer Evangelio. Todos los evangelistas narran el llamado que le hizo el Señor. Su profesión era de cobrador de impuestos, al servicio de los romanos. Sin duda era bien pagado, pero era mas odiado por los judíos.
No obstante, el Señor lo llamó al servicio del Evangelio. El lo siguió con generosidad y prontitud.
El escribió el primer Evangelio en la lengua que habló Jesús. Quiso que el mensaje de salvación llegara, de esa forma, a todos los judíos contemporáneos.
Parece ser que Mateo, hijo de Alfeo tenía dos nombres, pues Marcos y Lucas lo llamaban también Leví.
Después de pentecostés, Mateo se convirtió, como sus colegas, en heraldo del mensaje cristiano. Según muchos, el Evangelio según San Mateo, colocado al principio del Nuevo Testamento, es un resumen sistemático de lo que este Apóstol había escuchado salir de los labios del Salvador, y de lo que él mismo repetía a los judíos, para convertirlos durante sus predicaciones.
Concluyó el Evangelio escribiendo la consigna del Señor: “Vayan y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos”. (Mt 28,19).