Familias presas de la angustia y el dolor, abandonadas a su suerte.
Familias de colonias populares, viven un importante momento en su historia; el terror, el dolor, la angustia es el pan de todos los días de estas familias en varias colonias de León Guanajuato sin que la autoridad haga algo trascendente para aminorar sus sufrimientos, abandonadas a su suerte; tras la muerte de un joven, hijo de un dirigente de una destacada pandilla y que ha tomado un nivel ya no de pandilla sino de cartel, se desató totalmente la violencia en esa colonia que tiene años de padecer el salvajismo de la violencia como su cultura, es bueno referirse a esta colonia como la primera de tipo Infonavit que abrigó familias de obreros y trabajadores (sin menosprecio de sus labores por supuesto).
La reacción de la muerte del joven, cimbró a muchas familias que en su seno tenían algún miembro que pertenecía a una pandilla rival, muchas familias se aterrorizaron por la reacción del padre del joven; a su entierro del joven caen otros dos jóvenes que viololentados por piquete o machetazo su vida se desvanecía, estos últimos jóvenes tenían ya hijos pequeños de 5 años dejándolos huérfanos y con la triste probabilidad de que estos pequeños repitan la historia de sus padres; las familias en general que componen está colonia viven asustadas, con temor de verse involucradas y de la policía : “bien gracias”.
Una cadena que no se atreven a romper.
Ciertamente está colonia en la época de los 70´s se formó, las familias llegaron ilusionadas, con sueños ya que era la primera colonia que el Infonavit entregaba, casas para trabajadores que no podían hacerse de una casa nueva ahora era posible; familias de diferentes puntos de la ciudad se reunieron para formar la colonia, todo era alegría y aquellos departamentos y casas respiraban la satisfacción y agradecimiento a Dios; pasaban los días como cualquier colonia y los hijos fueron creciendo.
Al principio empezaron las rivalidades entre calles por problemas entre jóvenes que es muy común al crecer; el rock, la cerveza y algo de mota era lo más frecuente entre los jóvenes, las tocadas y aquellos pantalones apretados eran la moda que imperaba, el signo del amor y paz del hipismo en Estados Unidos brilló de repente en la colonia, largas melenas, lentes, la independencia de los jóvenes de los papas, grabadoras en las manos, música del Deep Purple, Black Sabbath, Janis Joplín, Led Zeppelín, Black oak Arkansas entre muchos más dejaban una bella época de Terrícolas, Solitarios, Pasteles verdes, Ángeles negros, Roberto Carlos etc.; comenzó el noviazgo de algunos jóvenes que encontraron el amor de su vida en esa colonia, muchos se casaron, algunos se quedaron en la colonia y otros se fueron a vivir a otra colonia, tal vez no sea nada trascendente que se distinga de otra colonia pero la droga comenzó a cobrar víctimas ya que era más común ver a algún joven oliendo un pedazo de estopa impregnado de thiner o una bolsita de hule con pegamento adentro que inhalaban, ver a jóvenes en un estado de afección a la droga se veía más seguido, pero todo era controlable, todo estaba en los parámetros de aceptación.
Muchas de estas familias fueron muy felices, sus hijos se casaron y ahora forman familias aceptables para la ciudad y dan frutos para el bien común, pero… otras no pudieron salir, no pudieron cambiar, no pudieron generar una cultura de solidaridad y aceptación entre ellos, no por falta de dinero o pobreza y aquellos golpes de esos primeros jóvenes de 15 a 20 años, la rivalidad de algunas calles que no podían verse entre ellas (álamo, arce, nogal, fresno, guayabo entre otras), se convirtieron en una nueva generación que rindió tributo a la violencia persistente, rebasó a los primeros jóvenes, sus actos delictivos fueron siendo más terribles de modo que superaron los puños con las armas blancas y de repente sonó el bum de una bala salida de una pistola de algún joven que sin querer abrió la puerta del mal en la colonia, un joven caía herido y las rencillas comenzaron, pero en medio de aquellos jóvenes violentos quedaron atrapadas familias que en esas casas esta todo su patrimonio, ¿cómo alejarse y dejar todo?, ¿quién querrá comprar una casa en esta colonia?, otros jóvenes nunca pusieron límites, a tal grado que ahora es una zona de alto riesgo, muchos de sus miembros salen a robar a las colonias vecinas y con acto de violencia toman por l vía de la fuerza computadoras, lap tops, tablets, relojes, equipos de sonido, celulares, dinero, siendo verdaderos portadores de muerte y amenaza ya que no miden el daño que pueden hacer a gente que pacíficamente viven en las colonias vecinas.
Las familias pacificas quedaron presas entre estos jóvenes, sus padres sufren en silencio y piden perdón a Dios por no haber roto la cadena de la violencia, porque no pensaron que la educación del hijo la tomara la violencia en lugar de ellos y muchas veces tuvieron que defender al malvado contra su voluntad por haber hecho un acto vandálico, actualmente algunos papas van al kínder, a la primaria por sus hijos e incluso a la secundaria con temor de que les hagan mal, no vaya ser que este hombre crea que se tuvo que ver con la muerte de su hijo y tome venganza equivocada, ciertamente son pocos en comparación con el resto de la colonia y estos pocos respiran muerte, ¿qué hacer en estos casos?
Acciones posibles:
(1) Cambiar de colonia y vender su casa. ¿Quién compra?
(2) Comprar una arma para defender a su familia en caso de un atentado (mala decisión).
(3) Pedir ayuda a la policía (ya lo han hecho y nada).
(4) Buscar un mediador (excelente idea) ¿quién?
Hoy la arquidiócesis de León intensifica su oración por esta colonia, funge como intermediario para que Cristo vuelva a salvar a esta colonia, vamos ofreciendo ayuno y más sacrificios para que el calvario de esta colonia termine; Dios es el único que puede transformar esta colonia, por eso la parroquia evangeliza y ofrece diferente formación bíblica hasta doctrinal a la feligresía, sólo Cristo Jesús puede domar esos corazones rebeldes que han desafiado a todo, sólo Dios puede lograr la paz, sólo Dios puede hacer el milagro de que estos jóvenes comprendan que la violencia ha hecho infelices a mucha gente y mucha es inocente de su situación.
Únase amigo a esta noble labor de interceder ante Dios para que en esta colonia vuelva a reinar la paz, muchos jóvenes han caído, han quedado familias destruidas, sufren su situación actual; lagrimas, oraciones, angustias interminables, incertidumbre viven estas familias, unas lloran la desgracia de la pérdida de un hijo, de un padre, ¿cuántos jóvenes han muerto?, ¿cuántos jóvenes se involucraron y no pudieron salir de un vicio o pandilla?; quizá alguno pudo ser un excelente profesionista, tal vez un abnegado sacerdote, un padre de familia ejemplar, un erudito de las ciencias, un deportista profesional de alto nivel, pero no llegaron a serlo porque se corto su vida antes.
Es tiempo de devolver la libertad a estas familias, es tiempo de que los jóvenes salgan de esta cadena que se repite de padres a hijos, es tiempo de abandonar las armas para creer en el prójimo, tiempo de perdonar, es tiempo de respirar vida y no muerte, es tiempo de fe, esperanza y amor, es tiempo de que Dios reine y de la paz, es tiempo de romper el terror, el miedo, el pánico en los jóvenes, de las familias y de los pequeños, es tiempo de conversión y de abandonar su misión que se precipita al abismo, es tiempo de creer que hay una vida nueva y que los pequeños no tienen la culpa de la ignorancia, de la incapacidad, de la falta de control de las pasiones de sus familias, ellos quieren vivir, no convirtamos un infierno su pequeña vida, la colonia clama: “paz, sólo paz.
Soy de Leon Guanajuato, tiene cerca de 30 años que por cuestiones de trabajo estamos fuera de la Ciudad… y, me duele mucho leer este articulo y saber de esta situación, creo que no solo es en esta colonia sino en varias de allá, Me uno a sus oraciones rogando a Dios La presidenta haga algo… Recuerdo cuando Carlos Medina, hizo reunión de bandas y, les ofreció areas de deporte, las escuela de oficios para prepararse y pudieran ser personas productivas incorporandose a la sociedad. Hubo muchas personas, la gran mayoria que ahora son personas respetable… Pidamos a Dios por la Presidenta, para que se preocupe y busque la forma de ayudar y encontrar la paz… Dios todo lo puede.