LA IDENTIDAD DEL APOSTOL – SERVIDOR
1. ACLARACIÓN DE TÉRMINOS.
a) Apóstol. Es el que está convencido y enamorado de Cristo, y que por consiguiente le anuncia y defiende al mismo tiempo, en medio del mundo que le ha tocado vivir.
b) Identidad. Responde a la pregunta ¿Quién soy?
1.- Conjunto de rasgos propios de un individuo o de una colectividad que los caracterizan frente a los demás. 2.- Conciencia que una persona tiene de ser ella misma y distinta a las demás. 3.- Hecho de ser alguien o algo el mismo que se supone o se busca.
Idem = el mismo, lo mismo.
Entidad = ente o ser; lo que constituye la esencia o la forma de una cosa
c) Personalidad. Responde a la pregunta ¿Cómo soy?
La personalidad puede sintetizarse como el conjunto de características o patrón de sentimientos y pensamientos ligados al comportamiento, es decir, los pensamientos, sentimientos, actitudes y hábitos y la conducta de cada individuo, que persiste a lo largo del tiempo frente a distintas situaciones distinguiendo a un individuo de cualquier otro haciéndolo diferente a los demás. La personalidad persiste en el comportamiento de las personas congruentes a través del tiempo, aun en distintas situaciones o momentos, otorgando algo único a cada individuo que lo caracteriza como independiente y diferente. Ambos aspectos de la personalidad, distinción y persistencia, tienen una fuerte vinculación con la construcción de la identidad, a la cual modela con características denominadas rasgos o conjuntos de rasgos que, junto con otros aspectos del comportamiento, se integran en una unidad coherente que finalmente describe a la persona.
Personalidad = temperamento + carácter.
d) Vocación. Responde a la pregunta ¿Señor qué quieres de mí?
Llamamiento o llamado. Inspiración con que Dios llama a un estado, especialmente al de religión.
2. EL APOSTOL- SERVIDOR ES LLAMADO POR DIOS (Vocación – identidad)
Dios es el que llama… y cuando llama es para una misión. Toda vocación supone una misión… y una capacitación para el desempeño de dicha misión.
Al llamar, Dios configura a la persona imprimiendo en ella una nueva identidad. Hace que llegue a ser algo que no era. La Palabra de Dios es creadora (Dabar). Cuando Dios llama a una persona crea algo nuevo en ella, modifica su identidad. Ejemplo: llamada de Abraham en Gen 17. Llamada de Jeremías en Jer 1,4ss. Llamada de Simón en Lc 5,1-11; Jn 1,42 y Mt 16,13-18.
Dos principios filosóficos para comprender el carácter dinámico de la identidad personal: Mismidad e ipseidad. Mismidad es aquello de nosotros mismos que no cambia ni se modifica con el tiempo. Ipseidad es aquello de nosotros mismos que se modifica y evoluciona conforme somos influenciados por diferentes factores tanto internos como externos.
3. EL APOSTOL-SERVIDOR NO NACE SE HACE (Formación)
El catequista se va haciendo. El punto de partida es la llamada histórica al ejercicio de la enseñanza cristiana. Y se va formando o adquiriendo forma en la mediad en que se relaciona y a prende a ser Maestro como Jesús. Estamos hablando de un proceso de formación y de transformación en Cristo, particularmente con su ser Maestro de discípulos.
4. EL PERFIL DE UN APOSTOL- SERVIDOR (Rasgos de la personalidad).
Hacer una lluvia de ideas entre todos.
San PABLO, MAESTRO DE LOS GENTILES.
Sobre la enseñanza. (De la primera carta del apóstol san Pablo a Timoteo, Capítulo 4)
6 Sí tú enseñas estas cosas a los hermanos, serás un buen ministro de Cristo Jesús, alimentado con las palabras de la fe y de la buena doctrina que has seguido fielmente.
7 Rechaza, en cambio, las fábulas profanas y los cuentos de viejas. Ejercítate en la piedad.
8 Los ejercicios corporales sirven para poco; en cambio la piedad es provechosa para todo, pues tiene la promesa de la vida, de la presente y de la futura.
9 Es cierta y digna de ser aceptada por todos ésta afirmación:
10 Si nos fatigamos y luchamos es porque tenemos puesta la esperanza en Dios vivo, que es el Salvador de todos los hombres, principalmente de los creyentes.
11 Predica y enseña estas cosas.
12 Que nadie menosprecie tu juventud. Procura, en cambio, ser para los creyentes modelo en la palabra, en el comportamiento, en la caridad, en la fe, en la pureza.
13 Hasta que yo llegue, dedícate a la lectura, a la exhortación, a la enseñanza.
14 No descuides el carisma que hay en ti, que se te comunicó por intervención profética mediante la imposición de las manos del colegio de presbíteros.
15 Ocúpate en estas cosas; vive entregado a ellas para que tu aprovechamiento sea manifiesto a todos.
16 Vela por ti mismo y por la enseñanza; persevera en estas disposiciones, pues obrando así te salvarás a ti mismo y a los que te escuchen.
Contra los falsos maestros. (De la carta del apóstol san Pablo a Tito, Capítulo 1)
10 Porque hay muchos rebeldes, vanos habladores y embaucadores, sobre todo entre los de la circuncisión,
11 a quienes es menester tapar la boca; hombres que trastornan familias enteras, enseñando por torpe ganancia lo que no deben.
12 Uno de ellos, profeta suyo, dijo: “Los cretenses son siempre mentirosos, malas bestias, vientres perezosos.”
13 Este testimonio es verdadero. Por tanto repréndeles severamente, a fin de que conserven sana la fe,
14 y no den oídos a fábulas judaicas, ni a mandamientos de hombres que se apartan de la verdad.
15 Para los limpios todo es limpio; mas para los contaminados e incrédulos nada hay limpio, pues su mente y conciencia están contaminadas.
16 Profesan conocer a Dios, mas con sus obras le niegan; son abominables y rebeldes e incapaces de toda obra buena.