“CUIDADO CON DESPRECIAR A UNO DE ESTOS PEQUEÑOS”.
En aquel momento los discípulos se acercaron a Jesús y le preguntaron: “¿Quién es el más grande en el Reino de los Cielos?”
Jesús llamó a un niñito, lo colocó en medio de los discípulos,
y declaró: “En verdad les digo: si no cambian y no llegan a ser como niños, nunca entrarán en el Reino de los Cielos.
El que se haga pequeño como este niño, ése será el más grande en el Reino de los Cielos.
Y el que recibe en mi nombre a un niño como éste, a mí me recibe.
Cuídense, no desprecien a ninguno de estos pequeños. Pues yo se lo digo: sus ángeles en el Cielo contemplan sin cesar la cara de mi Padre del Cielo.
¿Qué pasará, según ustedes, si un hombre tiene cien ovejas y una de ellas se extravía? ¿No dejará las noventa y nueve en los cerros para ir a buscar la extraviada?
Y si logra encontrarla, yo les digo que ésta le dará más alegría que las noventa y nueve que no se extraviaron.
Pasa lo mismo donde el Padre de ustedes, el Padre del Cielo: allá no quieren que se pierda ni tan sólo uno de estos pequeñitos.
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México