Aclamen a Dios en toda la tierra,
canten salmos a su glorioso nombre,
hagan alarde de sus alabanzas.
Digan a Dios: ¡Qué terribles son tus obras!
Toda la tierra ante ti se inclina,
te canta y celebra tu Nombre.
Vengan a ver las obras de Dios:
sus milagros que a los hombres espantan.
Transforma el mar en tierra firme,
por el río pasaron caminando;
¡Que para él sean nuestros festejos,
para el Valiente, siempre vencedor!”
Vengan a oírme los que temen a Dios,
les contaré lo que hizo por mí.
Pero Dios me escuchó
y atendió a la voz de mi plegaria.
¡Bendito sea Dios,
que no desvió mi súplica
ni apartó de mi su amor!
Biblia Latinoamericana / se toma como guía el misal Católico: Asamblea Eucarística. México