Un nuevo panorama para las escuelas bíblicas. Escuela teológica y pastoral de agentes. San Pío X.
Por Juan Revilla
Una generación más ha terminado su formación de 4 años, la escuela teológica y pastoral de agentes de San Pío X ofreció áreas de substancioso conocimiento de Dios: teología, cristología, psicología, sociología, área humana, moral y todo lo que concierne a la estructura de nuestra Iglesia, han sido su alimento durante estos 4 años; desde luego que hay gozo y una gran alegría en ver cómo Dios va formando a hombres y mujeres, sin límites en edad, sexo, color ó cualquier otro aspecto, sólo disposición para ser formado, cómo hizo Jesús con sus discípulos.
El esfuerzo de su director el Pbro. Eduardo Contreras ha sido admirable y loable, años siendo una escuela de formación y de ejemplo para otras muchas parroquias, eso es lo más motivante y alentador, pero hoy está misma escuela exige a sus egresados un compromiso mayor, si tienen esa capacidad que les ha sido compartida y formada, entonces tienen la responsabilidad de ponerlo al servicio de la Iglesia, La escuela teológica vive los cambios que hoy en nuestros días experimenta nuestra Iglesia católica, por tanto ya no es suficiente formar agentes , sino que estos se pongan a trabajar dentro de la Iglesia y de la sociedad, que sean los generadores de esa nueva mentalidad que el soplo del Espíritu Santo va haciendo y trnsformando en nuestra Iglesia querida.
Queridos hermanos, es tiempo de hacer vida lo que hemos aprendido, lo que en conocimiento se re-creó en nosotros, lo que Cristo nos revelo y se hizo visible y audible, el tiempo de expectación ya pasó , es tiempo de ser unos participantes activos, influyentes para bien en nuestra Iglesia y sociedad, hoy los conocimiento no se puede quedar en una libreta o apuntes, ni en suspiros que dicen: “qué bonito”, “ahh que grande es Dios”, hay muchos hermanos que aunque no nos dicen, gritan “queremos ver a Jesús”, hoy llevemos a que conozcan al Jesús vivo, que al resucitar dice a los egresados: “te transformaré en hombre nuevo”, “un vino nuevo en odre nuevo, sólo así será una nueva humanidad y la misión de Cristo empezará a dar frutos.